EN LANZAROTE

La Mareta: de residencia maldita para la Familia Real a refugio de Pedro Sánchez

La construcción de La Mareta fue un encargo del rey Hussein de Jordania

En el año 1989 el monarca jordano se la regaló al Rey Juan Carlos

La Mareta, Pedro Sánchez
Montaje de Pedro Sánchez y el Palacio de La Mareta. (Fotos: Gtres)
  • Lito Reyes
    • Actualizado:

Marivent lleva varias décadas siendo el destino vacacional de la Familia Real y, sobre todo, refugio para la Reina Sofía, que es la que más disfruta de sus estancias en Mallorca. Sin embargo, hubo un tiempo en el que los Borbones utilizaban otras residencias oficiales, entre las que se encuentra, por ejemplo, La Mareta. Un palacio ubicado en Canarias, en la isla de Lanzarote, que se ha convertido en los últimos años en bastión de Pedro Sánchez durante la temporada de verano. El presidente del Gobierno no perdona sus vacaciones en el complejo, donde puede relajarse prácticamente a cuerpo de rey con su familia.

Aunque ahora sea una residencia utilizada por el jefe del Ejecutivo, lo cierto es que La Mareta no se concibió con este objetivo. Es más, el palacio surgió como fruto de la estrecha relación entre la Casa Real de España y la de Jordania y representó durante muchos años esta especial amistad.

La Mareta

Exterior de La Mareta. (Foto: Gtres)

La historia de La Mareta

Ubicado en la zona de Costa Teguise en Lanzarote, la construcción de La Mareta fue encargada en los años 70 por parte del rey Hussein de Jordania al arquitecto Fernando Higueras y al artista lanzaroteño César Manrique. El monarca quería una casa que se mimetizara con el entorno, con lujos interiores, pero sin ostentación exterior. Por motivos que nunca se han conocido, Hussein nunca llegó a pasar sus vacaciones allí, se dice que uno de sus hijos estuvo allí durante su luna de miel.

En 1989, el rey Hussein regaló La Mareta al Rey Juan Carlos I, que la cedió a Patrimonio Nacional para que se utilizara a nivel estatal. Desde entonces han pasado por allí numerosas autoridades internacionales como Gorbachov y su esposa Raisa, Helmut Kohl, Gerhard Schröder o Václav Havel.

Discreto por fuera, opulento por dentro

Según las indicaciones del rey Hussein, la propiedad se mimetiza con el entorno y no destaca por su opulencia exterior. El nombre de La Mareta procede de una antigua mareta que había en la zona, un aljibe que se utilizaba para recoger agua de lluvia. La finca cuenta con un terreno de tres hectáreas en el que hay 10 bungalows, dos piscinas, pistas deportivas, helipuerto, así como acceso directo al mar. Todas las comodidades para unas vacaciones de lujo sin necesidad de salir de la finca. Eso, a un coste nada desdeñable. Según los datos que se tienen, el mantenimiento del complejo asciende a aproximadamente 10.000 euros mensuales.

Aunque pertenece a Patrimonio Nacional desde que el Rey Juan Carlos así lo convino, en 2015 Felipe VI expresó su deseo de que La Mareta se utilice con fines relacionados con la promoción turística de España. Con este objetivo existe un convenio de colaboración entre Patrimonio Nacional y el Ministerio de Turismo que regula su uso.

La Mareta, en Costa Teguise, Lanzarote, refugio de Pedro Sánchez

La Mareta, en Costa Teguise, Lanzarote, refugio de Pedro Sánchez / Gtres

Un episodio dramático

Para la Familia Real, La Mareta se encuentra asociada a uno de los momentos más tristes de las últimas décadas. En 1999, los entonces Reyes Juan Carlos y Sofía decidieron despedir el año allí, en lugar de en la nieve. Se trasladaron hasta Lanzarote con las infantas Elena y Cristina y sus familias y don Felipe, así como con la condesa de Barcelona y las infantas Pilar y Margarita con sus hijos. La celebración familiar terminó de la manera más inesperada posible, con la muerte de doña María.

El 2 de enero, doña María de las Mercedes de Borbón y Orleans, madre del Rey Juan Carlos I, falleció en el Palacio de La Mareta mientras descansaba tras un almuerzo. Había cumplido pocas semanas antes 89 años.

Rey Felipe, Reina Letizia, La Mareta

Don Felipe y doña Letizia en La Mareta. / Gtres

La muerte de la abuela de Felipe VI coincidió con la visita oficial del entonces presidente Aznar a La Mareta, lo que provocó un rápido cambio de planes. De hecho, el Rey Felipe regresó a Madrid en el mismo avión en el que volvieron el mandatario y su mujer.

La Familia Real al completo no ha vuelto nunca más a La Mareta, pero sí que lo han hecho los Reyes, que la visitaron en 2005, durante unas vacaciones de Navidad con la princesa Leonor.

El búnker de Pedro Sánchez

A pesar de que ni los Reyes ni nadie de la Familia Real ha regresado a La Mareta, Pedro Sánchez ha encontrado en este palacio su refugio perfecto. De la misma manera que utiliza el Falcon para la mayoría de sus desplazamientos o que se instala en la finca de Quintos de Mora (Toledo) o se escapa a Las Marismillas (Doñana), su presencia en La Mareta en verano es fija.

Pedro Sánchez

Pedro Sánchez en un acto reciente. (Foto: Gtres)

Este año, en medio de la crisis que afecta al PSOE y, de rebote al Gobierno, el presidente regresará a La Mareta. Quizás frente a la costa Atlántica tenga tiempo para reflexionar sobre su futuro y tomar por fin una decisión que no hace más que postergar de manera inevitable. Podría ser su último verano en la propiedad en la que se han invertido grandes cantidades recientemente para garantizar la seguridad del presidente y su familia.

Lo último en Actualidad

Últimas noticias