Máxima expectación en Ciudad Diagonal: la doble celebración de Shakira y Piqué en plena guerra

El 2 de febrero es un día muy importante tanto en la vida de Shakira como en la de Piqué, aunque ahora sus caminos estén separados. Pese a que su historia de amor haya llegado a su fin, y no de la mejor manera, siempre les unirán los hijos que tienen en común y, sobre todo, sus cumpleaños. Pues, qué irónica la vida, que una de las parejas más mediáticas del momento está a punto de soplar las velas en conjunto, aunque se espera que por separado.

Sin embargo, hay un tercer protagonista en esta relación que ha pasado desapercibido. Se trata de la casa que ambos tienen en la exclusiva urbanización de Ciudad Diagonal en Esplugas de Llobregat y que su precio podría ascender a los 11 millones de euros. En ella han vivido los momentos más bonitos de su matrimonio y han visto cómo su familia aumentaba. La colombiana siempre ha compartido en sus redes sociales los días en el hogar familiar, las risas con Piqué y los juegos con los pequeños de la casa. Una situación que ha cambiado por completo.

Cuando la ex pareja anunció su separación y llegó a un acuerdo por la custodia de sus hijos, se rumoreó con el traslado inminente de la de Barranquilla a Miami. Ese era su objetivo, poner tierra de por medio y retomar su carrera como artista en la lejanía de Estados Unidos, en concreto en una mansión que intentó vender hace unos años y que ahora ha puesto a punto para su nueva vida. Sin embargo, todos sus planes parecen haber quedado en pausa. Se ha especulado con que la colombiana se trasladará cuando sus hijos finalicen el año escolar, aunque se desconoce la fecha exacta de su mudanza. 

Mientras tanto, Shakira ha encontrado en la mansión que compartía con Piqué su mayor refugio. Hasta allí se han desplazado sus fans para mostrarle su apoyo tras el lanzamiento de la Session #53, cantándole serenatas en un intento de que se asomase al balcón. La casa ha sido también testigo del éxito musical de la colombiana, que no dudaba en montar una fiesta por todo lo alto y subir el volumen de su tema hasta escucharse en la casa de su suegra para festejar que, a pesar del dolor, «las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan». 

Este domicilio también ha participado en la mala relación entre Shak y su suegra, con una bruja adornando el balcón -y apuntando a la cocina de los padres de Gerard-. Pero no solo eso, sino que la propiedad también ha sido el escenario en el que la intérprete de Te felicito ha mostrado su faceta más desconocida, la que le ha acercado más a sus fans. Tras el cariño recibido por su último tema, Shakira no dudaba en salir al balcón para agradecer el apoyo de sus más fieles seguidores y deleitarles con su música.

Pero, además, este domicilio que un día fue familiar, también ha sido testigo de la felicidad de la pareja en sus años más bonitos, de los cumpleaños de los pequeños, de los innumerables éxitos de la colombiana y, sobre todo, de las vueltas al sol de la que un día fue la pareja más aclamada del panorama internacional. Shakira y Piqué, durante 12 años de relación, han soplado las velas en compañía, haciendo de su casa su mayor refugio y su zona de confort; pidiendo deseos antes de apagar la llama y celebrando la vida que tenían en común.

Mañana, este día tan especial que les unía aún más, cada uno lo vivirá por separado, pues no es ningún secreto la guerra abierta que mantienen después de su separación. Aunque la de Barranquilla ha intentado desviar la atención de esta fecha retrasando el lanzamiento de su nuevo tema junto a Karol G -que se rumorea que habla del despecho y el amor propio de ambas- lo cierto es que el todavía hogar de Shakira (aunque no por mucho tiempo) continúa siendo el centro neurálgico de la atención mediática más allá de sus continuos dardos envenenados.