Dos mujeres, tres hijos, una muerte prematura y un legado histórico: 40 años sin Paquirri
Francisco Rivera fue el mejor torero de su generación
Paquirri amasó una fortuna valorada en 473 millones de pesetas
El diestro estuvo casado con Carmen Ordóñez, una gran dama de la alta sociedad
La leyenda de Francisco Rivera Pérez, más conocido como Paquirri, empezó a escribirse el 16 de agosto de 1962. Aquel día debutó como novillero en Barbate (Cádiz) y no tardó en demostrar que había nacido para ser una figura de las plazas de toros. Lamentablemente falleció con 36 años tras sufrir una cogida en Pozoblanco (Córdoba), pero su legado sigue vivo. Han pasado cuatro décadas desde este triste suceso, aunque el nombre del torero continúa sonando con fuerza.
La tauromaquia no era un trabajo para Paquirri, era su forma de vivir. Heredó esta pasión de su padre, el novillero Antonio Rivera. También hay que tener en cuenta el importante papel que jugó su tío José en esta misión. Este último recibió el apodo de Riverita y llegó a ser un gran matador, aunque su sobrino consiguió adelantarle y se convirtió en la estrella de la familia.
El recuerdo de Paquirri está muy presente dentro del mundo del toro gracias a sus hijos mayores, Francisco y Cayetano Rivera. Son fruto de su matrimonio con Carmen Ordóñez y ambos han hecho historia en las plazas. Francisco se retiró el 2 de septiembre de 2017, pero ha seguido íntimamente vinculado a la profesión. Tanto es así que acaba de hacer un viaje a México para visitar un ruedo muy especial para él. Por su parte, Cayetano continúa activo y sigue registrando grandes éxitos.
La huella de Carmen Ordóñez
Paquirri conocía a Carmen Ordóñez desde que era un niño, ya que el padre de ésta era una institución dentro del mundo del toro. Antonio Ordóñez les dio su bendición y la pareja pasó por el altar el 16 de febrero de 1973. Ella tenía 17 años y él 24, pero la diferencia de edad no supuso ningún obstáculo. Estaban enamorados y lo único que querían era disfrutar de su relación. Se dieron el ‘sí, quiero’ en la iglesia de San Francisco el Grande de Madrid, ante más de 1.500 invitados. Dentro de este grupo se encontraban algunos rostros tan emblemáticos como Carmen Sevilla, Conchita Márquez Piquer o Lola Flores.
El matrimonio formado por Carmen y Paco duró hasta 1979, aunque muchos piensan que el maestro murió estando enamorado de ella. No obstante, cuando falleció estaba casado con la tonadillera Isabel Pantoja, quien nunca terminó de encajar dentro de la familia Rivera. La artista sigue teniendo problemas con Francisco y Cayetano, pues se niega a entregarles parte del legado que les dejó Paquirri. Sin embargo, ellos han heredado algo muy importante que ella jamás tendrá: la pasión por el toro.
Paquirri, un ejemplo a seguir
El diestro forma parte de la historia de la crónica social. Han pasado 40 años desde que se marchó y todavía se sigue hablando de él porque es un ejemplo dentro y fuera de su profesión. Tuvo tres hijos, se casó dos veces y consiguió vivir de su talento. Esta destreza le generó un patrimonio de 473 millones de pesetas. Carmen Ordóñez se desvinculó por completo de este dinero, pero Isabel Pantoja se aferró a él y todavía sigue pagando las consecuencias.
La socialité y la cantante no son las únicas mujeres que pasaron por la vida de Paco. Otra de sus relaciones más conocidas es la que mantuvo con Lolita Flores, quien sufrió mucho al ver cómo Isabel le quitaba el puesto. La prensa del corazón siguió esta trama con mucha pasión, pero no hay que olvidar que detrás de todo esto hay algo todavía más importante: un torero que consiguió cumplir su sueño.