Rovira exige a Illa firmar el pacto en Ginebra si el PSC alcanza un acuerdo de investidura con ERC

ERC obligará a Salvador Illa a acudir a Ginebra para negociar y firmar con Marta Rovira cualquier eventual acuerdo para hacer efectiva su investidura. De la misma forma que en Carles Puigdemont obligó a Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, a desplazarse a Bruselas en noviembre del año pasado para firmar el pacto que permitió la investidura de Pedro Sánchez. Los republicanos, cuyo partido se ha abierto en canal tras la última derrota electoral, siguen insistiendo en que su prioridad es no involucrarse en desbloquear la situación tras el 12M.

De esta forma, ERC opta por humillar de nuevo a los socialistas si quieren que Illa sea el futuro president de la Generalitat. Sus condiciones, después de lograr una amnistía que Moncloa les había negado repetidamente, siguen siendo las mismas: pacto fiscal y referéndum. Dos peticiones que en el PSC dicen que son inasumibles para ellos. De momento, esta misma semana, y tras un primer contacto entre los equipos negociadores en Barcelona que acabó sin ningún avance ni acercamiento, la número dos del PSC, Lluïsa Moret, viajará a Suiza para reunirse con Rovira.

La decisión de apoyar una eventual investidura de Salvador Illa es incómoda para el partido que lideraba hasta hace unos días Oriol Junqueras. A menos que el PSC atienda a sus peticiones de máximos. La salida del expresidente del partido, por eso, abona la tesis de los contrarios a alcanzar acuerdos con los socialistas. Más de 300 militantes de renombre firmaron inicialmente un manifiesto, que tiene el apoyo de más de 700, en el que se reclama a Junqueras que se aparte por completo.

En el entorno de Marta Rovira, secretaria general de ERC y máxima responsable de la formación y de las negociaciones a día de hoy, recuerdan que «el acercamiento al PSC y al PSOE nos ha hundido electoralmente». La secretaria general republicana, hace unos días, se reunió con los cuadros a nivel comarcal para instruir a la militancia de cara a ganar la consulta interna para rechazar el apoyo a Illa.

Junto a Rovira, en estas negociaciones con el PSC fuera de nuestro país para investir al exministro de Sanidad como nuevo presidente catalán, también estarán otros expertos en la negociación con el PSOE, como el cerebro del procés y presidente del Consejo Nacional de ERC, Josep Maria Jové; la secretaria general adjunta de ERC, Marta Vilalta; y la vicepresidenta en funciones del Govern, Laura Vilagrà. Los tres que están en Cataluña, en la órbita de la secretaria general y contrarios al pacto con Illa, han sido los responsables de los primeros contactos con los negociadores socialistas.

Por parte del PSC, además de la viceprimera secretaria y presidenta de la Diputación de Barcelona, Lluïsa Moret, también negociará la portavoz parlamentaria y número dos de la lista por Barcelona, Alicia Romero. Salvador Illa deja en dos de las personas de su máxima confianza el hecho de alcanzar un acuerdo que le conduzca al Palau de la Generalitat antes del 26 de agosto, cuando finaliza el plazo para investir a un candidato. De no ser así, ese día se disolvería el Parlament y se convocarían elecciones de forma automática para el domingo 13 de octubre.

En la sede de ERC, en el número 166 de la calle Calabria de Barcelona, reconocen que apoyar una investidura de Salvador Illa «no es ni la primera opción ni la que tenga más opciones a día de hoy». Pero es una de ellas, explican, «si las bases así lo piden mayoritariamente». La dirección que encabeza Rovira, por eso, está trabajando en la dirección de asegurarse que las bases avalan la decisión que tome la mayoría de la Ejecutiva. De hecho, la propia secretaria general aboga por un acercamiento a Junts de cara a una posible repetición electoral el próximo 13 de octubre. Ya en campaña, la fugada en Suiza defendía volver a tender puentes con los de Carles Puigdemont.

ERC quiere el perdón de Illa

En ese encuentro que ERC promueve con Salvador Illa en Ginebra, antes de cualquier debate de investidura, los republicanos también le exigirán al líder del PSC que verbalice de su propia voz un perdón por el trato que dispensaron los socialistas catalanes a los responsables del procés que fueron encarcelados el año 2017. Aunque tras los indultos se ha producido un acercamiento entre ambos partidos, en Esquerra consideran que ese perdón es «de vital importancia» de cara a normalizar las relaciones por completo y poder justificar así ante sus bases cualquier acuerdo a futuro.