El beneficio de Bankia cae un 22,4% y gana 804 millones a pesar de las menores provisiones

Bankia ha cerrado el año con un beneficio neto atribuido de 804 millones de euros, lo que supone una caída del 22,7% respecto al logrado en 2015. Las menores provisiones y la mayor reducción de los gastos de explotación no han servido para compensar la reducción de todos los márgenes, destacando el desplome del 18,1% contabilizado en el de intereses (que mide la salud del negocio tradicional bancario que consiste en captar depósitos y dar créditos).

Así lo indican los estados financieros de Bankia correspondientes al ejercicio 2016 y que han sido comunicados a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El grupo ha destacado en un comunicado que la caída del beneficio neto sería menor (del 8,4%) si se excluye la aportación extraordinaria de 164 millones de euros procedente del negocio del City National Bank of Florida.

“Pese al descenso, la confortable posición de solvencia permite proponer un incremento del 5% en el dividendo a abonar a los accionistas, que alcanzará los 317 millones de euros”, indica la entidad. El principal accionista de Bankia es el Estado a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que tiene el 65% del capital. Por ello el organismo ingresará 209 millones de euros en dividendos que se destinan a tapar parte del agujero del rescate. De los 22.400 millones de euros de inyección de dinero público el grupo ha devuelto mediante dividendos 1.836 millones.

A este respecto, el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha señalado que la evolución de los índices de rentabilidad y solvencia han facilitado a la entidad incrementar el dividendo a pesar de la caída del beneficio lo que, en definitiva, «permite seguir avanzando en la devolución de las ayudas a los contribuyentes».

«Hemos constatado los buenos resultados de nuestro nuevo posicionamiento comercial. La decisión de retirar las comisiones, con un impacto acotado en términos de resultados, ha tenido un efecto incluso mejor del esperado. El año pasado captamos más de 172.000 nuevas nóminas y subimos cuota de mercado en tarjetas, en fondos de inversión y en las partidas de crédito que nos marcamos como prioridad: consumo y empresas», ha explicado Goirigolzarri.

Bankia indica que sus cuentas se han visto afectadas por el actual entorno de bajos tipos de interés, que están en mínimos históricos debido a la barra libre financiera del Banco Central Europeo (BCE), por la venta del City National Bank y “por las provisiones realizadas para hacer frente a posibles contingencias derivadas de préstamos con cláusula suelo, que Bankia, con criterios de prudencia, ha decidido cubrir, tras haberlas retirado en septiembre de 2015”.

Sin embargo, cuando se observa el cuadro de resultados, se comprueba que el volumen de provisiones ha sido inferior al registrado el pasado año, con 494 millones de euros, un 31,4% menos que en 2015. Respecto al caso concreto de las correspondientes a la devolución de las cantidades indebidamente cobradas a los hipotecados por las cláusulas suelo la cuantía es de 65 millones de euros en 2016 y de 184 millones de euros el ejercicio anterior.

Por su parte, la tasa de morosidad se sitúa en el 9,8%, una décima menos que hace un año, con una ratio de cobertura del 58,7%. Los saldos de créditos dudosos (los que llevan más de 90 días impagados) bajan hasta situarse en 11.476 millones de euros. La rentabilidad sobre recursos propios (ROE) es del 7,3% excluyendo el impacto de la provisión de las cláusulas suelo.

En cuanto a la solvencia, el ratio de capital ordinario CET1 fully loaded (que es el que establece la nueva normativa de Basilea III que se aplicará en 2019) es del 13%, tras subir en 76 puntos básicos en el ejercicio. Esta cifra no incluye las plusvalías en las carteras de deuda pública, que llevarían la tasa al 13,53%.  Hay que recordar que cuando se produjo el rescate con fondos públicos de la entidad este ratio de capital era del 6,82%.