Vinicius también es Balón de Oro fuera del campo: salió del vestuario para firmar a unos niños
El brasileño atendió a unos aficionados del Real Madrid tras el partido
Salió del vestuario, se hizo fotos con ellos y estuvo un buen rato firmando autógrafos
Vinicius y Mbappé ya marcan diferencias
Vinicius Jr. ha vuelto a demostrar que también es el Balón de Oro fuera de los terrenos de juego. El delantero del Real Madrid tuvo un bonito gesto con unos aficionados que le estaban esperando tras el partido. El brasileño salió del vestuario en cuanto se enteró de que había unos niños en la grada con camisetas del conjunto madridista que reclamaban su presencia.
Con chanclas y una toalla en los hombros, el crack del Real Madrid salió a atender a los valientes que quedaban en el estadio de Balaídos. Vinicius firmó autógrafos a los niños y se fotografió con todo aquel que se lo pidió. A pesar del frío y de ir sin camiseta, el delantero aguantó y atendió a los fans después de la victoria del Real Madrid contra el Celta gracias a un tanto suyo en el minuto 66 de partido.
Esa diana valió tres puntos de oro que permitirán a los blancos llegar, como mínimo, a tres del Barcelona en la clasificación al Clásico. El conjunto catalán tiene que jugar todavía su partido de la jornada 10 frente al Sevilla este domingo, pero el triunfo del Real Madrid obliga a los de Hansi Flick a ganar si quieren llegar con ventaja al partido de la semana que viene en el Santiago Bernabéu.
Vinicius volviendo del vestuario para firmarle y hacerse fotos con los aficionados que se habían quedado en el estadio. Lo que la prensa no te enseñará.
— gam (@mbapadre) October 19, 2024
De momento, el conjunto de Carlo Ancelotti ha hecho los deberes en la Liga superando una dura prueba ante un combativo Celta en Balaídos. Los goles de Mbappé y Vinicius dan a los blancos su segundo triunfo fuera de casa esta temporada. Al Madrid le estaba costando ganar lejos del Bernabéu. Hasta este encuentro sumaban una victoria en seis partidos (entre Liga y Champions) fuera de su estadio, la de Anoeta frente a la Real Sociedad. Pero, este sábado, en el primer partido tras el parón, apareció la magia de las estrellas y los de Ancelotti sacaron adelante un partido que se complicó tras el gol de Swedberg, que suponía el empate a uno.
Vinicius y Mbappé lideran al Madrid
Los hombres de Carlo Ancelotti tienen todavía un gran margen de mejora, pero necesitan que Mbappé y Vinicius cumplan con su papel mientras el resto de piezas van encajando. Y este papel no es otro que ganar. Con estos dos jugadores enchufados, tal y como sucedió en Balaídos contra el Celta, las probabilidades de ganar crecen exponencialmente. Los necesitan a ellos y a un Courtois que siempre está para hacer milagros bajo palos.
Ancelotti advertía en la rueda de prensa previa al encuentro que este último parón de selecciones, en el que Mbappé se ha quedado en Valdebebas trabajando, potenciando diferentes aspectos y descansando, le ha venido francamente bien al francés. Ante el Celta lo demostró con un golazo, el más bello que ha marcado como jugador del Real Madrid, y mostrando un juego mucho más eléctrico y ligero. Todavía debe mejorar, pero ya se vieron brotes verdes.
La situación de Vinicius era diferente a la de Mbappé. El brasileño estaba mejor que el francés en los partidos previos al parón de selecciones, pero contra el Celta también enseñó una mejoría notable. Más rápido, más ágil, más peligroso, más certero y menos polémico. Vinicius se centró en jugar sólo y exclusivamente al fútbol y su equipo lo celebró, ya que volvió a ser determinante haciendo el gol de la victoria tras aprovechar una asistencia medida de Modric.