Leo Messi no levanta cabeza en la Champions. Ni el cambio de equipo, por el Paris Saint Germain, ha salvado al argentino de sufrir otra derrota humillante en la máxima competición europea. El argentino firmó una eliminatoria horrible contra el Real Madrid –incluso falló un penalti en la ida– incrementando una leyenda que se remonta a 2018.
Todo comenzó en el Olímpico de Roma cuando el equipo culé cosechó una derrota por 3-0 en la vuelta de cuartos de final de la Champions. Messi estuvo desaparecido en un partido que dejó a las claras que el Barcelona entraba en una espiral negativa de la que todavía no ha podido salir en Europa.
Al año siguiente, Messi vio cómo el Liverpool les sacaba de la Champions en un histórico 4-0 en Anfield Road. El equipo británico no dejó de creer y el 3-0 en contra que cosecharon en el Camp Nou lo remontaron en casa. Messi tampoco apareció en aquel encuentro haciéndose virales sus imágenes caminando con la cabeza agachada por el campo.
En 2020, tras el coronavirus, Messi sumó la noche más aciaga de su carrera cayendo eliminado en los cuartos de final por 2-8 ante el Bayern de Múnich. El delantero no fue determinante en un encuentro en el que el Barça vio cómo Coutinho se vengaba del club que le pagaba con un doblete.
Y avanzamos hasta el 2021, momento en que el Paris Saint Germain pasaba por encima del equipo culé logrando un 1-4 en el Camp Nou. Messi, en aquella ocasión, mojó de penalti, pero no pudo evitar una derrota que le hizo ver que el club no tenía para competir más allá de los octavos de final de la Champions.
Esta temporada, otra vez en octavos de final de la Champions, Messi no ha podido ser el jugador que se presupone a un vigente Balón de Oro. El argentino no ha tenido ningún peso ni relevancia en una eliminatoria que ha sido un cara a cara entre Mbappé y Benzema. El argentino suma una noche negra más en la Champions y van cinco seguidas.
