La renovación de Ferland Mendy con el Real Madrid está al caer, pero eso no descarta en ningún caso el fichaje de Alphonso Davies. Ambos finalizan contrato con sus respectivos equipos el 30 de junio de 2025, pero el primero de ellos lo tiene prácticamente hecho para continuar más allá de esa fecha. Méritos ha hecho de sobra a lo largo de una sobresaliente temporada en la que ha dejado atrás todos sus problemas físicos y ha rendido a un nivel espectacular, a la altura del mejor del mundo en su posición. Por su parte, la ampliación del canadiense por el Bayern de Múnich se antoja muy complicada, ya que el jugador está manteniendo el pulso y tanto él como el club blanco saben que su llegada es cuestión de tiempo.
Si no es este verano, una opción más que probable conociendo el estilo del Bayern en este tipo de movimientos, será el siguiente y sin pagar un sólo euro, llevando a cabo la fórmula empleada con David Alaba en 2021, Antonio Rüdiger en 2022 o el propio Kylian Mbappé en este 2024. En ese escenario Davies llegaría libre, pero la metodología del conjunto bávaro, que al igual que el Real Madrid sólo quiere a futbolistas que deseen jugar allí, podría acercarle a Valdebebas este mismo mercado.
El Real Madrid tiene la demarcación de lateral izquierdo perfectamente cubierta con un Mendy que ha disputado 37 partidos en el último curso y con un Fran García que se entonó y sorprendió positivamente a todos en el tramo final cuando Carlo Ancelotti le dio varias oportunidades como titular en su plan de rotaciones.
Es por eso que el fichaje de Davies no es necesario, pero sí una gran oportunidad de mercado de cara al futuro. El canadiense sólo tiene 23 años y está llamado a marcar una época en el fútbol europeo de esta década. De hecho, ya sabe lo que es jugar y ver puerta en el Santiago Bernabéu, pues lo hizo anotando el primer y único tanto del Bayern en la vuelta de las semifinales de la Champions League. También conoce lo que es ganar la competición como ya hizo en 2020 ganándose la titularidad en el carril zurdo con Hansi Flick.
Mendy y Davies, condenados a coincidir
Sin embargo, las altas exigencias económicas de su agente han provocado el enfado del Bayern, que a día de hoy se podría estar plateando aceptar una oferta a la baja del Real Madrid, con tan de no perderlo de forma gratuita la siguiente temporada. Mendy y Davies no son excluyentes, aunque el club blanco considera mucho más importante la renovación del muro galo que la llegada del joven lateral, pues confían en que tarde o temprano acabará viniendo.
La pasada semana, Uli Hoeness, presidente de honor del Bayern, le dio un ultimátum a Davies: «Le dijimos muy claramente que, si no renueva su contrato, lo dejaremos expirar. No le vamos a ofrecer más dinero». Esas palabras no cambiaron nada el parecer del Real Madrid, que ve cómo el canadiense está cumpliendo con su parte a menos de un año de poner fin a su vínculo con el mejor equipo de Alemania.
De esta forma, se confirmaba que el deseo de su agente, Nick Househ, que es que cobre más sea donde sea, pero el Real Madrid no tiene necesidad de cometer ninguna locura por Davies este mercado estival. Los blancos juegan con ventaja y lo consideran un fichaje que se cocina a fuego lento. Por su parte, el Bayern ya ha desembolsado alrededor de 150 millones de euros en lo que va de mercado y necesita aclarar cuanto antes el entramado de uno de sus futbolistas emblema.
Como se ha comprobado con las últimas palabras de Hoeness, el canadiense y su entorno exigen un salario demasiado alto para renovar con prima incluida por la firma, algo que el equipo alemán no está dispuesto a aceptar. Si el acuerdo sigue sin cerrarse y las posturas sin acercarse, la única salida factible para el canadiense es el Real Madrid, que espera tranquilo a que se desencadenen los acontecimientos. El club blanco no tiene ninguna prisa, ya que su planificación es, simplemente, magistral.
El plan del Real Madrid
El entorno del defensa ha reducido algo sus pretensiones, de los 20 millones anuales iniciales a los 16 que pide ahora, pero sigue siendo un esfuerzo supremo para el club bávaro que, de momento, sólo se acerca a los 13 kilos por temporada. Max Eberl, nuevo director deportivo del Bayern, ha sido claro con el representante del futbolista. Si siguen moviéndose en esas cifras, no habrá acuerdo. Y, en ese escenario, el gigante alemán solo maneja una posible solución: la venta.
Si no hay renovación, desde las oficinas teutonas no van a permitir que el jugador salga gratis el próximo verano. Forzarán la venta para esta temporada, pero, en esta situación, la sartén por el mango la tendrá el Real Madrid, que nunca llegará a los 50 millones de euros que pide el Bayern por el traspaso.