El Real Madrid, cuando empezó el verano y se abrió el mercado de fichajes, tenía dos objetivos. Uno, obviamente, era Kylian Mbappé, una operación que se cerró por la vía rápida. El otro, reforzar la posición de central con Leny Yoro como máximo objetivo. La entidad madridista quiso fichar al joven central francés que jugaba, precisamente, en el Lille, pero no fue posible. Y no lo fue porque la entidad francesa decidió que el zaguero no iba a cumplir su deseo de jugar con la camiseta del 15 veces campeón de Europa.
La relación entre Real Madrid y Lille no es mala, pero tampoco es buena. En el club blanco no olvidan lo que pasó el pasado verano, cuando la entidad francesa fue filtrando que no estaba en conversaciones con la entidad madridista por Leny Yoro y cuando decía de puerta para adentro que el central francés nunca jugaría como local en el estadio Santiago Bernabéu.
En el frente contrario, está un Lille que sigue molesto por la supuesta forma de actual del Real Madrid. En el club francés creían que la entidad madridista había llegado a un acuerdo con el entorno del futbolista y que le iban a tratar de convencer para que aguantase un año más en Francia y recalase libre en 2025 en la capital de España.
Mientras, Leny Yoro dejó claro a todos los clubes, Lille incluido, que su siguiente paso tras dejar el club que le había permitido llegar a la élite era irse al Real Madrid. El central lo tenía claro, aunque finalmente no ha podido cumplir su deseo de fichar por el vigente campeón de Europa.
Una locura que no se iba a hacer
Finalmente, Leny Yoro eligió el Manchester United después de una mareante oferta del club inglés, que además de ofrecer en torno a 63 millones de euros al Lille por el joven jugador francés, también da 10 millones netos al defensor. Y ante esas cifras, Yoro, que todavía tiene 18 años, aceptó irse a Inglaterra y no al Real Madrid. El dinero, y sobre todo la enorme diferencia entre lo que le daba un United que tiró la casa por la ventana y un Real Madrid que buscaba cuadrar cuentas y tener cabeza en cualquier fichaje, fue la clave para que Leny Yoro cambiara no pudiese cumplir su sueño.
El central francés, uno de los jugadores defensivos con mayor proyección en el fútbol europeo, quería jugar en el Real Madrid. Así se lo comunicó a su entorno y así se lo hizo saber al Lille y al propio club. El conjunto francés sabía perfectamente que el deseo de Leny Yoro era jugar en la capital de España, pero todas las partes también conocían que el Real Madrid no iba a pagar un pastizal por su incorporación.
En el club campeón de Europa no se puede (ni se quiere) competir con el Manchester United en unas cifras fuera de mercado. «Pagar 10 millones netos a un chaval es una anomalía», comentaban en el Real Madrid sobre el giro que ha habido con Leny Yoro. Estaba muy cerca del club blanco, pero llegó el Manchester United con una oferta mareante de 63 millones de euros, una cifra totalmente fuera de mercado.
El Lille siempre tuvo claro que el Manchester United iba a pagar lo que el Real Madrid ni se plateaba, por ello siempre tuvieron claro que iban a preferir que volase rumbo a la Premier League antes de recalar en la entidad madridista.