Jérome Brisard vuelve a sembrar el terror en el Bernabéu desde el VAR
Brisard anuló un penalti sobre Vinicius, llamó a Turpin por un agarrón de Rüdiger y omitió una acción similar sobre Asencio
El colegiado francés también fue protagonista, desde el VAR, en el Real Madrid-Arsenal de la pasada campaña
Guardiola acusa al árbitro de cobarde al pitar el penalti sin el VAR: «Era clarísimo, pero le faltaron…»
El VAR fue protagonista en la derrota del Real Madrid ante el Manchester City en el Santiago Bernabéu. Jérome Brisard, colegiado VAR del encuentro, intervino en dos acciones que marcaron el signo del partido y omitió su labor en un posible penalti sobre Asencio. A los tres minutos de partido, Matheus Nunes derribó a Viniciua y Turpin indicó la pena máxima. Brisard corrigió la decisión por milímetros, al considerar que la infracción se cometió fuera del área. Volvió a aparecer al filo del descanso, cuando el árbitro VAR llamó a Turpin para que viera un agarrón de Rüdiger sobre Haaland, que el colegiado dictaminó como penalti.
Las quejas llegaron por el doble rasero que aplicó el equipo arbitral en una acción similar. Raúl Asencio también fue agarrado dentro del área unos minutos después del penalti sobre Rüdiger, pero en esta ocasión el VAR no intervino para modificar la decisión inicial de Clément Turpin. Una situación que ya vivió el Real Madrid con Jérome Brisard en la pasada Champions, en la que el colegiado francés también actuó desde el VAR en la vuelta de cuartos de final ante el Arsenal. La polémica volvió a estar en los agarrones dentro del área, que tuvieron diferente consideración según el equipo implicado.
El conjunto merengue llegó al encuentro de vuelta en el Santiago Bernabéu con la complicada misión de remontar el 3-0 encajado en Londres. Pese a que el juego del equipo no acompañaba, el escenario y la historia crearon un ambiente de posible remontada en un feudo con un buen número de gestas a sus espaldas. El partido se enfrió desde el VAR en la primera mitad, con hasta siete minutos de interrupción en la revisión de dos jugadas. Brisard, tras cinco interminables minutos de espera, llamó al monitor a su compatriota Letexier para que valorara un posible penalti de Asencio sobre Merino. Rice había intentado el gol olímpico, por lo que el agarrón del defensor madridista no tuvo incidencia en la jugada. Aún así, el árbitro francés pitó la infracción. Courtois detuvo el lanzamiento de Saka y mantuvo el empate momentáneo.
La doble vara de medir de Brisard con los agarrones dentro del área también apareció en su primera visita al Santiago Bernabéu. Declan Rice sujetó a Mbappé cuando el delantero trataba de llegar a un balón prolongado por Rodrygo. Lexetier lo tuvo claro: penalti. La sensación sobre el césped fue de una acción similar a la que se pitó como penalti en el área local, pero el árbitro VAR no la consideró como tal. Brisard anuló la decisión inicial y cortó el intento de remontada de un Real Madrid que hubiera gozado de una oportunidad inmejorable de adelantarse en el marcador a los 20 minutos de partido.
Jérome Brisard, en el foco de la polémica en Francia
Jérome Brisard, árbitro VAR del Real Madrid-Manchester City en el Santiago Bernabéu, protagonizó una gran polémica en un partido de la Ligue 1 del pasado octubre. El colegiado galo detuvo el Niza-Olympique de Lyon por lo que consideró como cánticos ofensivos. En realidad, se trataba de un homenaje a las víctimas del atentado del 14 de julio de 2016 en Niza.
En el minuto 86 de cada partido, la hinchada local entona un «Daesh, Daesh, siempre os joderemos». El cántico hace referencia al grupo terrorista yihadista que perpetró un atentado que se cobró 86 vidas. Brisard consideró que era un cántico ofensivo, lo que despertó una oleada de críticas en Francia que acabaron con el presidente del Comité de Árbitros francés pidiendo perdón por lo sucedido.