El Real Madrid tiene que empezar a afrontar el futuro de Brahim Díaz. El malagueño está feliz en el Milan, pero este año pone punto final a su segunda temporada de cesión en el conjunto italiano y desde Valdebebas deben decidir si quieren seguir contando con un jugador joven, español y que no deja de crecer, o prefieren llegar a un acuerdo con el conjunto italiano, que si paga 22 millones de euros se quedaría con el futbolista en propiedad, algo que están preparados para hacer. Aunque los blancos siempre tendrán una opción de recompra de 27 kilos, por lo que el desembolso final en caso de ejercerla sería de cinco millones para recuperarle. Si Asensio no sigue, es el elegido.
El jugador de 23 años no deja de crecer en el Milan. Brahim suma cuatro goles y ha repartido dos asistencias en los 21 partidos que ha jugado. Y eso que no empezó como titular, ya que Charles De Ketelaere, que llegó a San Siro este verano a cambio de 32 millones de euros, le llevó en un primer momento al banquillo. Pero el buen rendimiento del español y la falta de adaptación del belga, han llevado al madridista a colarse de lleno en el once titular del conjunto rossonero.
Si le preguntan a Carlo Ancelotti, la respuesta sobre el regreso de Brahim Díaz es claro: «sí». El italiano vería con muy buenos ojos contar con el malagueño la próxima temporada, ya que es un jugador de calidad, joven y que puede actuar por ambas bandas y de mediapunta. Un futbolista que al Real Madrid le vendría especialmente bien tras la marcha de Bale e Isco el pasado verano y los posibles adioses de Asensio y Hazard le abren un hueco dentro de la plantilla.
Por lo tanto, si finalmente el Real Madrid decide quedarse con Brahim, Carlo Ancelotti estaría encantado. El entrenador le sigue con atención y sabe de primera mano como están siendo los progresos del jugador en Milan. El técnico tiene hilo directo con el club italiano, por lo que está al tanto de todos los avances. De hecho, para él no hubiese sido un problema que se hubiese quedado el verano pasado o este, pero la cantidad de jugadores que tienen los blancos en su posición le podían restar minutos, por lo que se apostó por la salida. Ahora, si mantiene el nivel, la idea es que el próximo año haga las maletas rumbo a la capital de España para quedarse, especialmente si el mallorquín no acepta la renovación a la baja que el club se plantea ofrecerle.