Pogba debe bajarse el sueldo para fichar por el Real Madrid
Paul Pogba tiene cada vez más complicado fichar por el Real Madrid de cara a la próxima campaña. Su precio de traspaso ya no es un problema, pero su sueldo aparece como un escollo demasiado grandes en una hipotética negociación
El encuentro entre Paul Pogba y Zinedine Zidane siempre ha estado separado por los millones. El nivel futbolístico del centrocampista francés no se pone en duda desde la directiva del Real Madrid, como tampoco su adaptabilidad al sistema de Zizou, pero aunque las condiciones económicas han cambiado con respecto a la capítulos pasados, el dinero sigue siendo un escollo para ver a Pogba con la elástica madridista la próxima campaña.
El Manchester United llegó a tasar a Pogba en el pasado en cantidades cercanas a los 200 millones de euros, una maniobra para espantar pretendientes y a la que el Real Madrid no quiso entrar. En ese precio –ni en uno parecido– se llegaría a un acuerdo por el jugador, por mucho que Zidane le tuviera en el tope de su lista de deseos. Ahora, con el contrato del internacional galo próximo a su vencimiento, es su ficha la que impide su adaptabilidad al proyecto del equipo blanco.
Pogba cobra en estos momentos cerca de 17 millones de euros por temporada, una ficha superior a la de cada uno de los jugadores que forman parte de la plantilla del Real Madrid. La escala salarial madridista es ejemplar y ha colaborado al saneamiento y estabilidad del club, por lo que los emolumentos del jugador deberían bajar ostensiblemente si quiere cumplir su objetivo de vestir de blanco.
A priori, una rebaja no parece una locura, pero resulta complicado pensar en un acuerdo en la actualidad entre Pogba y su representante, el ambicioso Mino Raiola, y el Real Madrid, inamovible en su postura. Además, el hecho de que en el club existan otros candidatos a reforzar el centro del campo, como Fabián, Van de Beek o Camavinga, convierten a Paul en uno más y no en una prioridad, lo que les da las de ganar en el caso.
Alternativas inseguras
Ante esta situación, el que se encuentra en una encrucijada es el propio jugador, quien considera que su ciclo, el segundo, en el Manchester United, ha finalizado, y su primera opción para continuar su carrera, el Real Madrid, sólo podría activarse –y sin asegurar éxito en la negociación– en caso de bajar notablemente su salario. El United sigue abierto a negociar una ampliación de contrato y la Juventus aprieta –o apretaba, antes del coronavirus– por pasar de alternativa a realidad para el francés, pero el sueño de jugar como local en el Santiago Bernabéu sigue diluyéndose en medio de la incertidumbre del próximo mercado de fichajes.