Fernando Alonso se queda mano a mano con Max Verstappen en Arabia Saudí

Fernando Alonso tenía dudas de si su Aston Martin sería competitivo en el circuito de Jeddah. El trazado de Arabia Saudí ofrecía unas características diametralmente opuestas a las del Gran Premio de Bahréin y el coche verde demostró que también va sobre railes en condiciones de curva rápida y rectas interminables. Segundo intercalado entre los Red Bull. Nada mal.

El asturiano exhibió en la segunda sesión de entrenamientos libres –en las mismas condiciones de la clasificación del sábado y la carrera del domingo– que va a ser un aspirante legítimo al podio este fin de semana. Fernando Alonso fue competitivo tan a una vuelta como en las llamadas simulaciones de carrera finalizando en segunda posición en la sesión a apenas 208 milésimas de Max Verstappen.

El bicampeón del mundo únicamente fue superado por un holandés que volvió a demostrar encontrarse en otra galaxia. El equipo energético bajó los tiempos a voluntad y todo apunta a que son los grandes favoritos a reeditar el doblete de hace 10 días en la prueba inaugural de la temporada.

Ferrari estuvo perdido en un circuito donde su potentísimo motor debería marcar la diferencia. Es posible que la escudería italiana estuviese trabajando de forma conservadora en esta sesión de viernes ante la falta de fiabilidad del monoplaza. Tanto Sainz, décimo, como Leclerc, noveno, tendrán que mejorar mucho sus prestaciones de cara al sábado.

La sorpresa de la jornada la dio un Alpine que terminó en cuarta posición con un Esteban Ocon que olvidó su última posición en la carrera de Bahréin. Pese a ser una actuación destacada del equipo francés, Fernando Alonso puede estar más que satisfecho por su decisión de embarcarse en la aventura de Aston Martin.

El español, pese a estar lejos de Red Bull, sabe que puede convertirse en un fijo en el podio de esta temporada en la Fórmula 1 si el resto no evoluciona en exceso. Ferrari está con miedo a romper el motor, mientras que Mercedes no está ni se le espera.