Ventajas y desventajas de dar a luz tumbada

El momento del parto es uno de los más deseados y temidos al mismo tiempo por cualquier mujer. Por eso es importante que esté lo más informada posible de cara a poder conocer cómo transcurrirá el mismo e incluso qué medidas adoptar para hacerlo más fácil. De ahí que, por ejemplo, sea útil que la gestante pueda saber cuáles son las ventajas y desventajas de dar a luz tumbada.

Precisamente todas esas son las que ahora te vamos a indicar a continuación. Todo para que si estás esperando un hijo puedas decidir cómo traerle al mundo:

Ventajas de dar a luz tumbada

En la mayoría de hospitales se apuesta porque cualquier parto se desarrolle estando la madre tumbada en la correspondiente cama o camilla. Si se opta por esta alternativa en lugar de otras es porque la misma trae consigo una serie notable de aspectos a favor entre los que podemos destacar los siguientes:

• Se considera que dar a luz tumbada es la mejor opción que existe a la hora de que la matrona y la ginecóloga que estén llevando el alumbramiento puedan realizar su trabajo. Es decir, esa posición les permite controlar en todo momento el parto e incluso llevar a cabo las maniobras que sean necesarias. Y esto se considera que es esencial para que el nacimiento del bebé esté perfectamente seguido por los profesionales médicos y puedan actuar como es debido ante cualquier imprevisto.
• De la misma manera, hay que resaltar que en el caso de que la situación se complique y haya que realizar una cesárea esa postura es la que facilita dicha intervención de forma rauda.
• La anestesia epidural trae consigo que la parturienta vea limitado, en cierta medida, el movimiento de sus piernas. Precisamente por eso se considera que, por tanto, le resultará más adecuado y pertinente estar tumbada.
• No se debe pasar por alto tampoco que se considera que para muchas mujeres estar acostadas les resulta más cómodo para afrontar el trabajo de parto que cualquier otra postura.
• De la misma manera, se considera que parir tumbada es la mejor alternativa, sobre todo, cuando se trata de partos largos. Y es que es la manera de que la futura mamá pueda descansar lo máximo posible en esa situación.
• Estudios llevados a cabo sobre las distintas posturas para dar a luz han venido a indicar que esta que nos ocupa reduce de forma considerable los riesgos de que la madre pierda mucha sangre en el parto.

Desventajas de dar a luz tumbada

De la misma manera, hay que tener en consideración que también el dar a luz tumbada tiene sus inconvenientes. En concreto, las mujeres que rechazan traer al mundo a sus hijos de esta manera lo hacen basándose en los siguientes principios:

• Se considera que el hecho de que la madre esté acostada reduce en torno a un 20 % lo que es la apertura de la pelvis. De ahí que el bebé vea disminuido el espacio que tiene para poder salir al exterior.
• Esa postura no favorece nada a la mujer que tiene que hacerle frente a un parto de riñones o espalda. Y es que si sufre ese dolor precisamente estar tumbada no le alivia nada el mismo, todo lo contrario.
• En esta lista de aspectos en contra de dar a luz tumbada está el hecho de que va en contra de algo tan básico como la gravedad. Eso supone que no facilite la salida del pequeño y que, incluso, en determinados casos sea necesario proceder al uso de fórceps.
• Parir acostada supone, además, que los vasos sanguíneos de la mujer se compriman, lo que no favorecerá en absoluto la circulación sanguínea. Es más, también se considera que no beneficia lo que es la oxigenación del recién nacido.

A grandes rasgos, estos podemos determinar que son los principales aspectos a favor y en contra de parir tumbada. Para que todas las embarazadas puedan tomar una decisión acerca de cómo quieren dar a luz a sus bebés, en próximas entregas ampliaremos la información. Es decir, daremos a conocer los pros y los contras del parto vertical, del alumbramiento lateral e incluso del parto “a cuatro patas”.

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