Diabetes infantil: primeros síntomas, consecuencias y tratamiento

• Blanca Espada @blank7133
• Redactora de contenidos en OkDiario. Escribiendo para blogs y empresas de contenidos digitales desde 2007.
• • 23/02/2023 08:00
  • Actualizado: 23/02/2023 08:00

29.000 niños en España tienen diabetes mellitus , tipo 1. Se trata sin embargo, de una tendencia creciente en todo el mundo hasta el punto de que que la diabetes infantil es la principal enfermedad endocrina de la edad pediátrica. Una enfermedad, la diabetes, que tiene un inicio agudo y que no proporciona una cura definitiva pero que, si se maneja con cuidado y regularidad, puede asociarse a una buena calidad de vida.  Conozcamos mejor esta condición, cuáles son los síntomas a monitorear y cómo comportarse.

¿Qué es la diabetes infantil?

La diabetes es  una enfermedad crónica caracterizada por un aumento de azúcar en sangre (hiperglucemia) como efecto de una falta absoluta o relativa de insulina en el organismo.

Es una enfermedad autoinmune que no solo afecta a los adultos, tanto es así que en los últimos años se ha producido un aumento de los casos de diabetes en niños. De hecho, la mayor aparición de diabetes infantil se manifiesta con dos picos: antes de los 5 años y entre los 10 y los 12 años junto con el desarrollo puberal.

Cabe señalar que existen diferentes tipos de diabetes. La diabetes infantil es la diabetes mellitus tipo I que se caracteriza por una deficiencia total de insulina. En sí, la falta absoluta de insulina es una condición incompatible con la vida: por eso, la evaluación de la condición y el tratamiento relativo deben ser oportunos.

Diabetes infantil: las causas

Al igual que ocurre con otras enfermedades autoinmunes, la diabetes infantil también está provocada por una reacción incorrecta del sistema inmunitario . En el caso de la diabetes infantil, tal y como aclara el instituto médico Johns Hopkins, el sistema inmunitario del niño daña las células del páncreas que se encargan de producir insulina.

La insulina, informa Manual MSD, es una hormona que controla la cantidad de glucosa en la sangre y permite que pase a las células. La falta de insulina provoca un aumento de la concentración de glucosa en la sangre y un suministro insuficiente para las células. Su concentración en sangre provoca la presencia de insulina en la orina, exponiendo al organismo a una serie de complicaciones, incluso muy graves.

Hasta la fecha, no se conocen con certeza las causas específicas que conducen a la aparición de la diabetes infantil. Los expertos sugieren que además de los factores genéticos, también pueden interferir factores ambientales . Entre estos, se debe prestar atención a la leche materna y al destete.

En lo que respecta a la lactancia materna, en la actualidad está ampliamente establecido en el campo médico-científico que es una elección sumamente ventajosa para el recién nacido. Esto juega un papel protector en el desarrollo de la autoinmunidad para la diabetes tipo I (la forma infantil), pero aún no está claro cuál es la duración mínima de la lactancia. Por esta razón, los pediatras recomiendan la lactancia materna como una forma de prevención para los niños con riesgo de diabetes infantil.

Al mismo tiempo, se debe prestar atención al comienzo del destete . A lo largo de los años, el inicio de la alimentación complementaria se ha modificado y retrasado con respecto al pasado. Hoy se recomienda ofrecer al bebé lactancia materna exclusiva hasta el sexto mes de vida, también porque el destete precoz, antes de los 3-4 meses de vida, está asociado a un mayor riesgo de diversas patologías.

No existe evidencia científica que explique la relación entre la aparición de la diabetes infantil y el momento del destete, pero anticipar demasiado el inicio de la alimentación complementaria puede no ser beneficioso para el niño.

Los primeros síntomas de la diabetes infantil

La diabetes infantil se acompaña de diversos síntomas que los padres deben vigilar atentamente para poder intervenir con prontitud. El niño diabético tiene una micción mayor tanto en la frecuencia como en la cantidad de orina producida (poliuria).

También está constantemente sediento y hambriento , lo que requiere una ingesta de líquidos y alimentos superior a la normal (polidipsia y polifagia). A pesar de esto, el niño experimenta pérdida de peso y se queja de dolor abdominal que no se puede relacionar con otras condiciones.

En las formas más graves de diabetes infantil, también puede presentarse estado confusional , alteración de algunas funciones mentales y coma . El Royal Children’s Hospital Melbourne también enumera la visión borrosa , el cansancio excesivo, las náuseas y los vómitos como posibles síntomas .

La Clínica Mayo , por su parte, también añade irritabilidad, cambios de comportamiento y un aliento con olor afrutado. Otros signos pueden ser temblores , piel pálida , sudoración excesiva y palpitaciones .

Consecuencias y riesgos

Como se anticipó, estamos hablando de una condición que, si no se maneja adecuadamente, lleva al niño a la muerte. Además de este resultado, la diabetes infantil puede tener varias consecuencias: enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos y accidentes cerebrovasculares .

El estrechamiento y el daño a los vasos sanguíneos pueden provocar daños en los riñones, los ojos y los nervios. Además, como consecuencia de la reducción de la densidad mineral ósea, el niño tiene un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis.

No menos importantes ya los que hay que prestar la debida atención son los problemas psicosociales . Los niños con diabetes corren el riesgo de sufrir ansiedad, depresión, trastornos alimentarios y otros problemas psicológicos. Estas alteraciones pueden afectar a la capacidad del niño para gestionar su alimentación y la ingesta de fármacos, provocando un mal control de la glucemia que lo expone a todas las consecuencias y riesgos que hemos mencionado.

¿Se puede curar la diabetes infantil?

La diabetes es una enfermedad crónica que persiste durante toda la vida . No tiene cura pero sí una terapia que, si se sigue correctamente, permite al niño y luego al adulto llevar una vida normal.

Tratamiento y terapias

El diagnóstico de diabetes infantil se basa en un simple análisis de sangre (incluso una sola gota es suficiente) o una muestra de orina. La presencia de valores de azúcar en sangre por encima de 125 mg/dl tras un ayuno de 8 horas o por encima de 200 mg/dl independientemente de las comidas realizadas son de hecho elementos que confirman la presencia de diabetes.

A partir del análisis de sangre también es posible identificar los anticuerpos presentes e identificar el tipo de diabetes . Tras la confirmación del diagnóstico, a los niños se les prescriben pruebas adicionales para comprobar la presencia de otras enfermedades autoinmunes como la enfermedad celíaca , trastornos de la tiroides , algunos trastornos articulares y musculares y del tracto digestivo.

El manejo de la diabetes infantil se basa en dos estrategias: atención a la nutrición y ejercicio e inyecciones de insulina . Estos deben realizarse varias veces al día mediante inyección subcutánea que se realizará utilizando dispositivos especiales que son simples y prácticos de usar.

Además del tratamiento a base de insulina, es fundamental que el niño siga un estilo de vida saludable caracterizado por una actividad física regular, una dieta equilibrada (proporcionando la ingesta de alimentos nutritivos bajos en calorías y grasas) y el control autónomo regular de la diabetes también en el manejo de cambios continuos en los niveles de glucosa en sangre.