El lado oculto del CrossFit: puede provocar pérdidas de orina en las mujeres

• Diego Buenosvinos
• Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.
• • 02/12/2024 06:40
  • Actualizado: 02/12/2024 06:40

Se estima que el CrossFit lo practican más de 1 millón de personas en todo el mundo y las aperturas de centros de entrenamiento para realizar sus ejercicios funcionales de alta intensidad no para de crecer. Dos de los motivos principales por los que el CrossFit tiene tantos adeptos y sigue in crescendo son la transformación física y también mental que provoca en todos y cada uno de sus fans. Pero su práctica también puede traer consigo una serie de consecuencias no tan favorables.

La Dra. Zuramis Estrada, ginecóloga directora médica de CIMEG Madrid, afirma que el Crossfit puede provocar pérdidas de orina a partir de los 30 años (o incluso antes). Te contamos los porqués y cómo puede prevenirse o  tratarse si ya sucede…

«Es cierto que el CrossFit puede ayudar a mejorar habilidades físicas: fuerza, resistencia, coordinación, equilibrio, movilidad… También promueve la salud cardiovascular, un peso sano, que los músculos estén más fuertes y la salud mental. Pero hay que tener en cuenta que la práctica de sus ejercicios de alta intensidad también podría ser peligrosa si no se toman las precauciones adecuadas», señala la Dra. Zuramis Estrada.

«Su naturaleza de alta intensidad, los movimientos complejos propios del levantamiento de pesas olímpico, la gimnasia, la calistenia, etc. pueden conducir a lesiones, cansancio extremo, estrés cardíaco y otras alteraciones como el desbalance muscular. Es cierto que no siempre ocurre, pero es probable cuando los entrenamientos se enfocan solo en ciertos tipos de ejercicios o patrones de movimientos en los que ciertos músculos se trabajan más que otros. Si se mantiene así con el tiempo, puede desembocar en debilidades musculares que afectan la funcionalidad en general», añade.

¿Por qué sucede?

«A nuestra clínica acuden mujeres jóvenes (30-40 años o incluso de menos edad) que hacen CrossFit y nos cuentan que desde que practican este deporte tienen pérdidas de orina. Esto ocurre porque los músculos que abrazan la uretra se han debilitado y el cierre del esfínter -durante el aumento de las presiones abdominales con el esfuerzo- no es el adecuado», comenta la Dra. Zuramis Estrada.

«Hay que señalar que no sólo el CrossFit produce que se escape la orina. Otros deportes como los levantamientos de peso, hacer running y todos los deportes que generan gran impacto sobre los músculos del suelo pélvico pueden provocar pérdidas si no tenemos la zona entrenada correctamente», afirma.

Prevención y tratramiento

«Las mujeres tienen que ser conscientes de que tienen un complejo de músculos, ligamentos y tendones en su zona pélvica. Entrenar el suelo pélvico con ejercicios personalizados como Kegel o con terapias de energías específicas como es la radiofrecuencia fraccionada con microagujas Empower RF de InMode: sus manípulos Morpheus8V y V tone ayudan a trabajar el suelo pélvico debilitado o no entrenado, mejorar su tono y neuromodular eléctricamente todo el complejo pélvico», señala la Dra. Zuramis Estrada.

«En ocasiones, se necesita combinar con otras terapias en clínica como la terapia magnética focalizada, entrenamientos en casa como abdominales hipopresivos y consejos como, por ejemplo, evitar estreñimiento, mejorar la postura, realizar respiraciones adecuadas con entrenamiento del diafragma y dieta», comenta la experta.

Si haces CrossFit o algún otro deporte de impacto y aún no tienes pérdidas de orina, pero tienes miedo a que ocurra, ¡puedes prevenirlas!

«Las pérdidas de orina se pueden prevenir. De hecho, mi apuesta es -siempre- la medicina preventiva y las mujeres que practican CrossFit deben entrenar todas las cadenas musculares sin olvidarse de la pelvis y todo el core abdominal. Además, recomiendo acudir a evaluación y control especializado de su suelo pélvico y realizar terapias preventivas en clínica cada 6 – 12 meses y también recomiendo las terapias físicas tipo fisioterapia de suelo pélvico con tablas específicas».