Langostinos a la cerveza

Los langostinos a la cerveza son una de las recetas más sencillas y deliciosas que existe. Se trata de una manera perfecta de cocinar unos simples langostinos que pueden ser frescos o congelados, quedan siempre impresionantes. Este marisco llegará a una nueva dimensión del sabor con un rebozado de excepción. Gracias a la cerveza que podemos utilizar para rebozados o bases de pizza con un sabor un tanto distinto, conseguiremos darle un punto crujiente y con matices amargos que combinarán a la perfección con la dulzura y la textura de los langostinos. Si quieres un entrante de lujo, toma nota de estos langostinos a la cerveza, quedarán de cine.

Ingredientes:

• 24 langostinos
• 3 cucharadas de harina
• 1 lata de cerveza
• Jugo de 2 limones
• ½ l de aceite para freír
• 3 cucharadas de perejil fresco picado
• Sal
• Pimienta

Cómo preparar unos langostinos a la cerveza:

1. Empezamos esta receta preparando con mucho cuidado el ingrediente estrella, los langostinos. Si son congelados no esperaremos a que estén del todo descongelados para pelarlos, la piel sale mucho mejor durante este proceso. Los pelamos con cuidado y les limpiamos la parte central, quitando el hilo negro que los recorre, son sus tripas y pueden ofrecer un sabor amargo al plato.
2. Vamos reservando los langostinos. Podemos dejarles la cola si nos gusta, aunque se comen mucho mejor si están totalmente pelados, el objetivo es preparar un plato fácil de comer y con una delicadeza excepcional.
3. Llega el momento del rebozado. Tamizamos la harina para que no quede ningún grumo. Añadimos a la harina la cerveza poco a poco intentando que se vaya integrando de forma natural. No deben quedar grumos, una salsa espesa pero fina es lo que nos interesa que quede, perfecta para cubrir los langostinos.
4. Salpimentamos los langostinos al gusto, para darles un punto más de sabor, los pondremos en jugo de limón. Este ingrediente ácido va perfecto en cualquier rebozado, ayuda a que sea mucho más digestivo y, además, ayudará a que se cocinen antes.
5. Secamos los langostinos y los pasamos por la salsa que hemos creado. Mientras preparamos la sartén con abundante aceite caliente. Vamos friendo los langostinos, consiguiendo que se cree sobre ellos un rebozado crujiente y dorado.
6. A medida que vamos teniendo los langostinos listos, los colocamos sobre una fuente con papel absorbente. Dejamos que se escurra el aceite sobrante y colocamos en el plato, con un poco de perejil picado por encima. Podemos acompañarlos de una mayonesa casera o una salsa rosa, estarán de lujo.