Recetas de cocina

Albóndigas húngaras

Albóndigas húngaras, si te gusta la carne este plato es ‘para disfrutar’ jugosas albóndigas con una salsa de tomate aromatizada con vino, verduras y especias. En otro artículo de Okdiario-recetas hicimos albóndigas de bacalao. Hoy te contamos como preparar albóndigas húngaras de carne.

En Hungría las albóndigas se llama fasírt o fasírozott, y se elaboran con dos tipos de carne, (cerdo y ternera) mezcladas con ajo, cebolla y pimentón. La gastronomía húngara tiene influencias alemanas, asiáticas italianas y también eslavas. El pueblo húngaro de tradición nómada tiene muchos platos tipo guisado o estofado con carne, en el pasado se hacían al aire libre. El más conocido es el goulash o estofado y también son conocidas sus albóndigas. Te contamos la receta.

Albóndigas húngaras

Ingredientes para 20/30 albóndigas dependiendo del tamaño

Para la salsa

Preparación

En primer lugar precalentar el horno a 150 grados. En un recipiente mezclar todos los ingredientes para las albóndigas menos el aceite de oliva. Trabajar la mezcla y hacer bolitas, más o menos te salen entre 20/30 albóndigas. Dejarlas reposar en la nevera durante 20 minutos.

En una sartén verter aceite de oliva y dorar las albóndigas por todos lados.  Retirar de la sartén y dejar sobre un papel de cocina que absorba el aceite sobrante.

En la misma sartén añadir un poco más de aceite de oliva y saltear la cebolla picada, el ajo y el pimiento durante dos minutos. Añadir las especies y remover otro minuto. Agregar el vino blanco y cocinar hasta que el vino se evapore.

Remover y añadir el tomate frito y el caldo de pollo, añadir las albóndigas y llevar a ebullición. Preparar un molde de horno y verter las albóndigas y el resto de ingredientes en la fuente. Hornear durante al menos 1 hora y 10 minutos. Luego dejar otros 10 de reposo.

Sacar las albóndigas del horno y rascar el molde, verter la salsa sobre un recipiente y añadir la media taza de leche evaporada o nata (la leche evaporada tiene menos grasa y calorías y es una buena alternativa a la nata).

Remover. Verter la salsa en una fuente y encima las albóndigas, añadir sal y pimienta y espolvorear con perejil picado. Si te sobra salsa se congela bien y la puedes usar con arroz o pasta.

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Elena Bellver