Digitalización DÍA MUNDIAL DEL MEDIO AMBIENTE

Impulsar una digitalización responsable para una transición verde

Telefónica
Detalle de la sede de Telefónica. @Cortesía

Todas las acciones que se desarrollan en el seno de las grandes empresas tienen un impacto sobre el medioambiente, con independencia del sector en el que desarrollen su actividad. Por esta razón, las principales corporaciones internacionales llevan años trabajando en conformar estrategias de sostenibilidad, íntimamente alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.

Este es el caso de Telefónica, una compañía comprometida con la descarbonización de la economía, para lo cual lleva a cabo una digitalización responsable que genere competitividad y un impacto positivo colectivo.

Las transiciones verde y digital se refuerzan mutuamente. Y es que, según estudios del Foro Económico Mundial o el Exponential Roadmap indican que las soluciones digitales bien formuladas pueden reducir las emisiones globales un 15% en sectores como el energético, la industria, la agricultura o el transporte, y hasta un 35% gracias a su capacidad de transformar los hábitos de las personas hasta 2030.  

Son, sin duda, soluciones vitales para lograr disminuir las emisiones mundiales, tal y como establece el Acuerdo de París. Un camino en el que, además, la digitalización juega un papel clave, al ser una de las herramientas más potentes a nuestro alcance para conseguir que los procesos sean más eficientes. 

El poder de la digitalización

Concretamente, este aspecto se puso de manifiesto durante la COP29, en el Día de la Digitalización. Una jornada que busca el compromiso y las sinergias de los diferentes agentes sociales para que fomenten la adopción de soluciones digitales, y limiten el uso de recursos por parte de la tecnología.

En ese contexto, se presentó la Declaración sobre la Acción Digital Verde, promovida por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU): una acción que fue suscrita por más de 1.000 organizaciones, entre las que se encuentra Telefónica. Una declaración que, según reza, es un compromiso para «reducir la huella medioambiental de la digitalización, mejorar la toma de decisiones basada en datos y reforzar la infraestructura vital de las comunicaciones digitales frente a los impactos del cambio climático».

Telefónica: cero emisiones en 2040

Para lograr avances, el gran reto del sector es desacoplar el crecimiento de los datos del consumo de energía, y así contribuir a la transición verde de Europa con una digitalización responsable. Telefónica aborda este desafío con éxito a través de redes más eficientes, como la fibra y el 5G; junto a medidas de eficiencia energética y electricidad renovable. 

Con todo ello, la operadora tiene el objetivo global de alcanzar las cero emisiones netas en 2040 en toda la cadena de valor, adelantándose diez años a los acuerdos internacionales. Para lograrlo, Telefónica se compromete a reducir sus emisiones un 90% y a neutralizar las emisiones residuales a través de la compra de créditos de carbono de absorción de CO₂, preferiblemente a través de soluciones basadas en la naturaleza.

La compañía también fue la primera teleco del mundo en obtener la validación de la iniciativa Science Based Targets (SBTi), según el nuevo Net-Zero Standard, de sus objetivos medioambientales cero neto, tanto a corto como a medio y largo plazo. Un reconocimiento que consigue en 2022, evidenciando que su ruta de descarbonización está alineada con la ciencia.

En términos netos, desde 2015 Telefónica ha conseguido disminuir un 52% todas sus emisiones. 

Reto: mantener estable el consumo eléctrico

El reto para Telefónica es mantener estable el consumo de electricidad, a pesar del fuerte incremento de la digitalización de la sociedad y el aumento de los datos que van por sus redes de telecomunicaciones. Los principales ahorros se consiguen, sobre todo, modernizando su red y apagando equipos antiguos. La fibra es un 85% más eficiente energéticamente que el cobre y el 5G, un 90% más que el 4G. 

A ello suman iniciativas para reducir la energía en los periodos de menor tráfico y en la refrigeración, la iluminación, los equipos de fuerza, etc. Telefónica ha desarrollado y puesto en práctica 201 iniciativas de eficiencia energética en 2024 y ha logrado reducir el consumo de energía un 8% entre 2015 y 2024, pese a que el tráfico de datos ha aumentado nueve veces.

La operadora, tras cumplir su meta de 2025 de disminuir el consumo de energía por unidad de tráfico en un 90%, quiere reducirlo un 95% para 2030. Aún así, debemos señalar que Telefónica usa 100% energía eléctrica renovable en Europa y Brasil y que, como consumidor en diferentes países, contribuye a generar más energía limpia. Para cumplir ambos objetivos se fomentan los acuerdos de compra de energía a largo plazo (PPA por sus siglas en inglés).

Circularidad: cero residuos en 2030

El mejor residuo es el que no se produce, por ello, Telefónica tiene como objetivo ser una compañía Residuo Cero en 2030

Por eso, integra la economía circular en sus procesos para optimizar el consumo de recursos y promueve el diseño con criterios ambientales, la reutilización y el reciclaje para minimizar su impacto y favorecer la reincorporación de materiales al ciclo productivo. La circularidad permite evitar emisiones indirectas de carbono, asociadas a la extracción de nuevos materiales vinculados a la fabricación de nuevo equipamiento, lo que contribuye a alcanzar las cero emisiones en 2040.

El objetivo Residuo Cero busca transformar los residuos en recursos gracias a una gestión adecuada. La compañía prioriza la reutilización y, cuando no es posible, obtiene el valor de los materiales mediante el reciclaje. El número de equipos de operaciones, oficinas y clientes reutilizados en 2024 ha ascendido a cinco millones, un 11% más que en 2023. Asimismo, se reutilizaron y reciclaron el 95% de los residuos generados.

Soluciones digitales para la transición verde

Por último, destacar que en este camino de la descarbonización, Telefónica también ayuda a sus clientes a ser más sostenibles, y lo hace a través de sus soluciones Eco Smart, verificadas por AENOR. Por ejemplo, permite ahorrar energía, emisiones de CO₂ y agua, y a fomentar la economía circular.

Estas soluciones tienen el potencial de generar beneficios ambientales en las actividades y negocios de sus clientes. La mayoría de estas soluciones se basan en tecnologías de Internet of Things, Big Data, Cloud e Inteligencia Artificial. Hoy en día el 57% de las soluciones B2B, que ofrece la telco, están verificadas por AENOR.

En conjunto, estima que sus servicios de Eco Smart y de conectividad ayudaron a sus clientes en España, Brasil y Alemania a evitar la emisión de 17,4 millones de toneladas de CO₂e en 2024.

En esta transición verde, es importante no sólo impulsar nuevas soluciones de sostenibilidad, sino también ponerle cifras y cuantificarlas, con el fin de poder mejorar los procesos. Para ello, realiza casos de estudio con sus clientes B2B y encuestas a sus clientes residenciales, tanto en España como en Brasil y Alemania, para analizar cómo sus hábitos digitales les ayudan a ser más sostenibles.

Por poner varios ejemplos, las videollamadas que hacen los clientes españoles eviten hasta 18 viajes nacionales y tres internacionales al año; la compra online ahorra más de 28 desplazamientos por persona al año, mientras que la mayoría se harían en coche de gasolina o diésel. Por último, gracias a la formación online, los clientes se ahorran más de tres desplazamientos a la semana.

Por todo ello, Telefónica ha sido reconocida, por undécimo año consecutivo, como compañía líder global por su acción contra el cambio climático al formar parte de la ‘Lista A’ elaborada por CDP, organización sin ánimo de lucro cuyo informe es considerado el «estándar de oro de la transparencia medioambiental corporativa» y el referente para analistas e inversores en esta materia.