España se sitúa como uno de los países europeos más retrasados en fomentar la energía solar
Un análisis de Otovo suspende a nuestro país en los trámites y en las subvenciones para implementar este tipo de tecnología
El programa de ayudas para incentivar la energía solar de España ha sido señalado como uno de los más deficientes, a nivel europeo, debido a su falta de transparencia, comodidad y accesibilidad, al dejar el diseño de ayudas en manos de los consistorios municipales y comunidades autónomas.
Un diseño complejo que suspende a España en materia de energía solar en las tres características necesarias para ayudar a su despliegue que se rigen por principios de eficiencia, simplicidad y eficacia, según ha analizado la compañía de autoconsumo solar Otovo.
Desde la empresa afirman que los resultados demuestran que en los países europeos en donde hay una mayor penetración de tecnologías verdes, las medidas empleadas más eficientes son la combinación de tecnologías subvencionadas o la deducción de impuestos elevados.
España frente a los Países Bajos
Como dato, llama la atención que entre estos países que realizan un esfuerzo en este sentido destaca Países Bajos, donde el 25% de los hogares tiene instalados paneles solares, frente al 2% de los españoles.
En incentivos, España junto a Suiza, se posiciona como uno de los países más deficientes para generar demanda para implantar la energía solar dado al carácter descentralizado de los mismos, ya que el porcentaje de bonificación o permiso para realizar la instalación depende de los criterios de cada municipio, tal y como ha constatado Otovo.
Una complejidad que contrasta con el fomento de políticas como la deducción por tecnología verde de Suecia, país que aplica una reducción fiscal única para paneles, baterías y cargadores de vehículos eléctricos que se descuenta de modo automático de la factura sin necesidad de solicitarlo.
Otro ejemplo es la combinación de tecnologías subvencionadas que ofrece Alemania, un país en el que el consumidor puede obtener hasta 10.200 euros por instalar un panel solar, batería y vehículo eléctrico, combinación efectiva que ayuda a aumentar la demanda de este tipo de tecnologías.
Suspenso en eficiencia
«Este suspenso en eficiencia viene confirmado por las múltiples quejas que están elevando las distintas comunidades autónomas respecto a la carga administrativa de las ayudas europeas, por ejemplo», señalan la compañía.
Otovo destaca que los resultados demuestran que la sencillez en los trámites burocráticos estimula la implantación de este tipo de tecnología. De este modo, la compañía señala que los gobiernos han de apostar por un programa sencillo, cómodo y accesible que permita a los consumidores presentar solicitudes y seguir el proceso de una forma intuitiva.
Una situación reflejada en Polonia, país que, tras prohibir el gas por el conflicto ruso, eliminó todos los requisitos para solicitar la conexión a la red y permitió a instalaciones de 50 kW.
Además, a diferencia de otros países, aplica un IVA reducido a todas las tecnologías verdes que contribuyan a la modernización de la vivienda. Un modelo que contrasta con lo que ocurre en España, donde contar con una bonificación distinta según lo que estipule cada municipio, supone un tremendo esfuerzo para saber qué ayuda financiera se puede esperar y cómo solicitarla.
Modelo descentralizado ineficiente
En lo que a creación de oportunidades para nuevos productos y servicios respecta, el modelo descentralizado de España en cuanto a instalación de energía solar destaca nuevamente como ineficiente, al no promover ayudas que estimulen nuevas oportunidades de mercado para las empresas dedicadas a estas tecnologías.
A diferencia del avance en países como Noruega, que con un 24% se posiciona como la región con mayor porcentaje de vehículos eléctricos de Europa. Una tecnología, que al igual que en el caso de las bombas de calor (presentes en un 70% de los hogares noruegos) queda explicado por la intervención del gobierno.
Hasta 2022, todas las personas que adquirieron un coche eléctrico podían disfrutar de un descuento del 25% en la compra y tasa de matriculación. Además, actualmente este tipo de vehículos cuenta con incentivos atractivos como la gratuidad de peajes, túneles, tarifas de aparcamiento reducidas o carriles bus gratuitos.
Complejidad y opacidad en España
Una serie de medidas que, además de fomentar el uso por parte de los consumidores, ayuda a aumentar la demanda y crear nuevas oportunidades para empresas dedicadas a este sector. Según Otovo, la complejidad y opacidad de los mecanismos en España hace a los consumidores desconfiar, suspendiendo en eficacia y sencillez.
«Ahora que las ayudas Next Generation al autoconsumo solar han terminado y tan solo quedan las bonificaciones por IBI, ICIO o IRPF, el gobierno español debe de trabajar en un modelo central, a nivel estatal que promueva la instalación de paneles solares y baterías de una forma sencilla, rápida e intuitiva», explica Íñigo Amoribieta, director general de Otovo en España.
«Un nuevo programa que incluya otros tipos de suscripción como el alquiler de paneles solares, modelo popular en los Estados Unidos, que facilite la accesibilidad a estas tecnologías», apunta Amoribieta.
Agilidad y eficacia
El responsable indica que balance, transparencia, comodidad y accesibilidad son las cualidades más atractivas para hacer posible un programa de subsidios eficaz.
Otra de las recomendaciones es que los consumidores conozcan el programa de subvenciones y los criterios, así como un proceso accesible y veloz, permitirán no solo la adquisición, sino la creación de nuevas oportunidades de mercado en relación a estas tecnologías.