Un Rolls-Royce Phantom también puede ser hortera
Todo en esta vida es posible. Hasta que un Rolls-Royce Phantom, uno de los modelos más elegantes del planeta, sea hortera. La culpa la tienen el programa de personalización de la marca británica y un excéntrico millonario que responde al nombre de Michael Flux. Éste, que ya tiene algún que otro Rolls personalizado en su garaje, ha recibido una de las unidades del Phantom más llamativas de la historia. Al menos en lo que a su interior se refiere.
Si miras atentamente el coche por fuera no verás nada que te llame la atención para mal. Es más, la decoración exterior demuestra que el señor Flux, cuando quiere, tiene buen gusto. La carrocería viene decorada en color blanco Cornish White, tonalidad que casa a la perfección con las brutales llantas cromadas de 21 pulgadas que equipa el coche. Tal es el gusto por los detalles de este individuo que hasta los neumáticos cuentan con una pequeña banda blanca a juego con el resto del vehículo.
Hasta aquí todo normal, algo que cambia en cuanto nos adentramos al interior del Rolls-Royce Phantom de Flux. En lugar de apostar por una decoración elegante, el millonario se ha decantado por una tapicería de color verde Aequus Green, misma tonalidad que recorre todo el habitáculo. Y cuando decimos todo, es todo. Volante, consola central, salpicadero, etc. Tampoco podemos dejar pasar la oportunidad de comentar las alfombrillas, cuyo largo pelaje unido al color elegido nos proporcionará la sensación de estar saltando a un campo de fútbol más que metiéndonos en un coche de alto calado. Además, al abrir la puerta el bueno de Michael Flux verá una inscripción con su nombre. Ya sabéis que siempre conviene recordarse a uno mismo que cuentas con un coche que nadie más en el planeta posee.
Donde no tenemos noticia de variación alguna es en el motor. De esta manera, el Rolls-Royce Phantom del señor Flux dispone del conocido propulsor V12 de gasolina convencional, el cual es capaz de desarrollar un total de 460 CV de potencia. Como ya sabes, éste se asocia a una caja de cambios automática de ocho relaciones, la cual ayudará a que la conducción de este vehículo sea lo más confortable posible. Por desgracia, desconocemos el precio que se ha pagado por este Phantom, aunque parte de esta cifra estaría bien que su dueño la emplease en unas clases de decoración de interiores…