Radares móviles: sabremos dónde están
Dicen que los radares de velocidad están colocados por y para nuestra seguridad. Si es así, deberían dejar que llevásemos algún tipo de dispositivo que los detectase. Así reduciríamos la velocidad en los tramos que se suponen más peligrosos. Pero como esto no va a suceder, al menos legalmente, debemos contentarnos con el anuncio que ha hecho la DGT. Al parecer, y con motivo del comienzo de las vacaciones de verano de muchos españoles, se va a publicar durante el mes de julio una lista con las ubicaciones de los radares móviles que se vayan a utilizar. Sí, esos que generalmente nos causan disgustos en forma de multas.
En total estamos hablando de un total de 1.200 tramos ‘susceptibles de ser vigilados’, donde los más de 800 radares móviles de los que dispone la guardia civil irán actuando durante esta época estival. Estas zonas de vigilancia serán publicadas en la web de la DGT de forma periódica, de tal forma que puedas consultar tu itinerario para ver si entras en zona de riesgo. Eso sí, que entres en uno de estos tramos no significa que haya en ese momento un radar actuando.
En el caso de algunas Comunidades Autónomas, la información acerca de la ubicación de los radares móviles ya está disponible. Por ejemplo, en Castilla y León hay un total de 276 zonas donde este tipo de dispositivos puede funcionar. En Asturias, otra de las comunidades donde se tiene esta información, existen hasta 29 zonas controladas.
Además, la DGT ha optado porque los radares, tanto fijos como móviles, estén situados en lugares donde sean visibles. Habrá que ver hasta que punto se respeta esto, pero desde luego sería una medida que los conductores agradeceríamos, especialmente por la mejora a nivel de seguridad que supone. Se evitarían en gran parte los típicos frenazos que todos hemos dado cuando de repente nos cruzamos de forma imprevista con un radar.
Según María Seguí, cabeza visible de la DGT, los criterios de ubicación de los radares son el resultado de aplicar una metodología propia desarrollada por la Dirección General de Tráfico. Ésta tiene en cuenta cuatro parámetros diferentes, como son el número de accidentes graves ocurridos en esos tramos, el número general de accidentes independientemente de la gravedad, la información sobre la velocidad media en ese tramo y el rango de la carretera.
En cualquier caso, más vale prevenir que curar. Aunque no dudamos de las buenas intenciones de la DGT -desde luego toda esta declaración de intenciones es un paso adelante- la mejor solución será siempre la de respetar las normas al volante. No va a cambiar nuestra vida por llegar 20 minutos antes a nuestro destino vacacional. Y es que, si echas cuentas, tampoco vas a ganar mucho más tiempo si te saltas todos los límites de velocidad marcados por las autoridades. La seguridad es lo primero.