Parquímetros: fallos que acaban en multas
Los parquímetros son ya parte de nuestro día a día. Parece mentira, pero nos hemos acostumbrado a pagar por aparcar en la calle. Y no por un precio bajo, precisamente. Al menos, con el paso del tiempo se nos ha facilitado bastante la labor, ya que a día de hoy no es necesario buscar la dichosa máquina para dejarnos los cuartos. Basta con tener en nuestro smartphone una aplicación que nos permita sacar de forma virtual el ticket que nos de vía libre para aparcar legalmente en la vía pública.
Sin embargo, el avance de las nuevas tecnologías trae consigo nuevos problemas. Fallos técnicos que hasta la llegada de éstas no estaban contemplados, y que curiosamente todos derivan en multas para el usuario. Esto es precisamente lo que le ha ocurrido a un ciudadano madrileño, que vio como era sancionado después de que no pudiese completar el pago para estacionar regularmente por problemas técnicos.
No es el primero ni será el último de los usuarios de aplicaciones móviles para el pago de los servicios de aparcamiento regulado que es multado. Por suerte para él, nuestro amigo se adelantó a la situación que se le venía encima e hizo una captura de pantalla de la incidencia para poder presentar pruebas en caso de problemas. Así tuvo que actuar tras ser multado indebidamente. El juzgado Contencioso Administrativo número 23 de Madrid tuvo en cuenta la prueba y dio la razón a este cliente de Pyramid Consulting cuando estimó su recurso, señalando que «la admisión por parte de la Administración de este sistema de pago es la que conduce, igualmente, a admitir que sus dificultades deberán tener una incidencia en el ámbito de la sanción que se produce como consecuencia conexión con el sistema de dispensación de tickets».
El juzgado además señala que si la Administración pone a disposición de los ciudadanos este tipo de sistemas que presentan dificultadas, debe tenerlo en cuenta a la hora de anular multas. No es lógico que el administrado deba soportar unos problemas técnicos no imputables a su persona y además tener que buscar sistemas alternativos para obtener el distintivo que le permita el estacionamiento sin multa.
Desde que existen este tipo de sistemas de ‘pago virtual’, los controladores, cuando no ven ticket físico en el salpicadero de un vehículo, consultan mediante su PDA si la matricula asociada al coche ha realizado el pago mediante el móvil. Aunque como habréis podido comprobar con este caso, no está de más hacer una captura de pantalla para evitar problemas. Tanto si la aplicación no funciona correctamente como si el parquímetro sufre algún tipo de incidencia que impida el pago, es la única defensa que tendremos y con lo que podremos acreditar que hubo problemas técnicos. De lo contrario, lo más seguro es que nos toque pagar, aunque no sea nuestra culpa.