Amaia Romero da a conocer los entresijos del fenómeno ‘OT’: "no me sentí nada cómoda"

El fenómeno ‘OT 2017’ no dejó a nadie indiferente. Después de años retirado de la pequeña pantalla, el talet show regresó a la cadena que lo vio nacer para resurgir con la misma fuerza que lo convirtió en un fenómeno de masas a comienzos de los dos mil. Vuelta que contó con una estrella indiscutible: Amaia Romero. Al igual que en su día lo hiciera Rosa López, la pamplonica logró ganarse el favor de la audiencia utilizando como armas su talento y espontaneidad. Un combo perfecto que la convirtió en ganadora de la edición y en la perfecta ‘nueva famosa’ para los medios. Tarea nada sencilla para una joven de tan solo 18 años que cambió las aulas de su instituto por los platós de televisión. Los meses pasaron, los años, concretamente dos, y tras el tsumani mediático, Amaia Romero ha conseguido lo que parecía imposible: tomar las riendas de su carrera.

«No me conocía cuando la gente que cree que me conoce perfectamente me vio en un canal 24 horas, y eso fue hace ya dos años. Con todo lo que me ha pasado en este tiempo, soy una persona bastante diferente. Con otra mentalidad, más estable emocionalmente… Por un lado está guay, porque así puedo sorprender. Cuando dicen un ‘jo, Amaia, qué decepción’, me parece interesante. Me entretiene», ha dicho Amaia Romero en una entrevista que ha concedido para la revista Esquire. «Quería ir con mucho cuidado y decidir todo lo que pasaba a mi alrededor. Mi objetivo primordial era lograr ese poder de controlarlo todo y ahora lo tengo. ¿Ha sido difícil conseguir la libertad? Más bien ha sido lento. Quizá si desde el principio hubiera tenido una idea más clara del camino exacto que quería tomar, habría sido todo más fácil y rápido», añade la pamplonica, confesiones con las que explica lo que ha supuesto para ella este tumultuoso camino.

Para muchos, Amaia ha vivido en los últimos años en un sueño hecho realidad, algo que en muchas ocasiones no se ajusta del todo a la realidad. La cantante reconoce que ha tenido que hacer frente a momentos complicados, situaciones en las que incluso tuvo que ceder ante trabajos que no eran de su agrado. «Lo primero de todo que rechacé fue una campaña con una marca de coches que quería que hiciera no sé qué, ni me acuerdo. Yo pensaba: ‘¿Qué sentido tiene que esté yo aquí?’. Igual otras personas sí, pero yo… No me sentía nada cómoda. Varias veces he dicho directamente que no por sentido común, pero también es verdad que he aceptado otras por dinero, incluso sin estar muy cómoda. ‘Venga, pues vale. ¿Me van a pagar? Pues oye, se hace», revela la artista, que a comienzos de septiembre sacará al mercado su primera álbum. Una apuesta muy personal que se aleja del carácter comercial que llevaba implícito su pistoletazo de salida.  [LEER MÁS: Irene Urdangarin da una lección de estilo a las puertas del hospital]