El día que Letizia miró con buenos ojos y ‘copió’ a la infanta Cristina
Han pasado más de tres lustros desde que doña Letizia entrara a formar parte del clan Borbón y especialmente este año, la esposa de Felipe VI ha alcanzado su cénit en cuestión de estilo. La Reina se ha convertido en una de las mujeres más admiradas no solo en España, sino también en el resto del mundo, pero no siempre fue así.
Hubo un tiempo en el que doña Letizia no tenía un estilo tan definido como ahora y no contaba con el apoyo de una estilista como Eva Fernández que la ayudaba a elegir con acierto sus looks. En sus primeros años, la esposa de Felipe VI apostó por Lorenzo Caprile como modista de cabecera, a quien desplazó Felipe Varela.
La relación de doña Letizia con Caprile está muy ligada con las infantas doña Elena y doña Cristina. Caprile era íntimo amigo de la entonces duquesa de Palma y fue ella quien se lo recomendó a su cuñada. Pero más allá de que el modista hiciera brillar a la consorte en varias de las grandes citas de sus primeros años como miembro de la Familia Real, lo cierto es que hubo otra ocasión en la que doña Letizia puso sus ojos en la infanta Cristina, al menos a tenor de uno de sus looks.
En septiembre de 2006, los todavía duques de Palma asistieron a una recepción en el Palacio Real con motivo de la visita del entonces presidente de Portugal. Una velada en la que doña Cristina apostó por un sencillo diseño de gala en tonos grises con bordados florales cuyo origen se desconoce. La Infanta lució también la tiara floral que los Franco regalaron a doña Sofía con motivo de su boda con don Juan Carlos y que se ha convertido en una de las preferidas de doña Letizia.
Aunque el estilismo de doña Cristina no llamó especialmente la atención, apenas unos meses después, el 30 de enero de 2007, doña Letizia aparecía por sorpresa en la cena de gala que don Juan Carlos y doña Sofía ofrecieron en el mismo escenario en honor del Presidente de México, Felipe Calderón, y su esposa, Margarita Zavala. La presencia de la entonces princesa no estaba prevista, ya que se encontraba embarazada de la infanta Sofía y su agenda era más reducida.
En esta cita, doña Letizia apostó por un sencillo vestido premamá en tonos grises con detalles florales. Un modelo que guardaba grandes similitudes con el look que doña Cristina había escogido unos meses antes y del cual tampoco se conoce la procedencia.
Aunque no se sabe si la hoy reina se inspiró en su cuñada o no, resulta cuanto menos curioso que ambas coincidieran en elección con tan poco tiempo de diferencia. Está claro que hubo un tiempo en que su estilo no era tan antagónico y sus posturas en muchas cuestiones estaban mucho más próximas.