La vida en rosa de la Reina Letizia en Alemania: nueva coincidencia y el bolso más original

El rosa parece haberse convertido en el nuevo color fetiche de la Reina Letizia, al menos, en los últimos días. La esposa de Felipe VI ha vuelto a apostar por esta gama cromática en una nueva jornada de su viaje de Estado al país germánico. En esta ocasión, la Reina ha recuperado de su armario un sencillo, pero muy favorecedor vestido de corte clásico de Moisés Nieto, de manga francesa, largo midi, falda ligeramente evasé y cintura marcada, que estrenó hace ya dos años, en un acto en el Palacio Real coincidiendo con el aniversario de la proclamación de Felipe VI.

La Reina ha visitado esta mañana la exposición temporal de la Colección del Museo “Helga de Alvear” en el Palais Populaire de Berlín. Una visita que ha estado marcada por el clima inestable y la lluvia, frente al sol que lució en la primera jornada en la capital alemana. Lo ha hecho, una vez más, en compañía de primera dama de Alemania, Elke Büdenbender, con la que, al igual que en el recibimiento oficial, ha vuelto a coincidir en la elección de gama cromática. Ambas han ido de rosa, eso sí, el de la Reina, más saturado que el de su anfitriona. Hay que recordar que, en su primer encuentro oficial, las dos mujeres optaron por looks en azul.

Sin embargo, más allá de esto, si hay un detalle que ha llamado la atención, es el bolso de la Reina. Doña Letizia ha puesto un toque de color al otoño alemán con un original bolso en estampado floral que es nuevo en su armario o, al menos, no había lucido en público hasta ahora. Se trata de un complemento de la firma italiana Furla, el modelo Toni Ballerina, elaborado en piel texturada con estampado floral en distintos tonos. Un accesorio poco habitual en doña Letizia, que prefiere bolsos y zapatos más sobrios, pero que le ha dado un toque diferente a su look.

Además del bolso, doña Letizia ha lucido unos zapatos de salón de tacón alto en color nude, pendientes de aro en oro y su inseparable sortija dorada de Karen Hallam. No ha faltado un abrigo en color camel, colocado sobre los hombros, para hacer frente a las bajas temperaturas de la época.

En esta jornada, Sus Majestades han comenzado su agenda por separado. Ha sido el Rey el primero en inaugurar el día, participando a primera hora en un desayuno con una representación de empresarios españoles y alemanes y más tarde, en el Foro Hispano-Alemán en la sede en Berlín de la Fundación Bertelsmann y en un encuentro con señora Bärbel Bas, presidenta del Parlamento alemán. Más adelante, la Reina ha visitado la exposición temporal de la Colección del Museo “Helga de Alvear” en el Palais Populaire de Berlín y ya poco antes del mediodía, Sus Majestades se han encontrado en el Ayuntamiento de Berlín y han visitado la Puerta de Brandeburgo, acto con el que se ha puesto punto final a la estancia de los Reyes en la capital alemana, antes de poner rumbo a la ciudad de Frankfurt, donde tienen varios compromisos de índole cultural.