Victoria de Suecia: del hermetismo a la polémica por su último regalo
La heredera se ha comprado una finca a 40 kilómetros de su residencia oficial, donde pretende construir una casa para disfrutar de su tiempo libre en compañía de su familia y en plena naturaleza.
Victoria de Suecia da un paso insólito. La heredera al trono sueco se ha comprado un terreno en la isla de Fågelbrolandet, a unos 40 kilómetros al este de Estocolmo. Una información que ha hecho pública el medio NVP y han confirmado fuentes oficiales de la Casa Real. Según la Directora de Comunicación de los Bernadotte, Margareta Thorgren, la Princesa tiene previsto construir una vivienda que sería para los fines de semana. La misma fuente ha asegurado que se trata de una inversión privada de Victoria y Daniel, ajena completamente a la Casa Real. La parcela no se encuentra muy lejos de su actual residencia, el castillo de Haga, aunque sí supone un entorno diferente en el que la familia podrá disfrutar de períodos de descanso alejada de su actividad oficial.
Aunque fue el pasado año cuando el matrimonio adquirió el pasado año, la situación de emergencia sanitaria a causa de la pandemia ha provocado que los planes de los Príncipes quedaran aplazados. De hecho, no ha sido hasta ahora cuando por fin han obtenido la licencia de obras para la construcción de la casa. Quizás esperaban poder haber concluido las obras para este verano, ya que acaban de celebrar 11 años de matrimonio.
A pesar de que no resulta muy extraño que la pareja quiera tener una casa de fin de semana, lo que sí ha llamado la atención de muchos medios locales es el hecho de que hayan buscado en una zona tan cercana a su residencia oficial. Lo cierto es que incluso el rey Carlos Gustavo cuenta con una casa de verano privada en St. Tropez, uno de los destinos turísticos de mayor afluencia.
La elección de este lugar por parte de Victoria se debe a que la Princesa y su familia son unos grandes amantes de la naturaleza y esta parcela se encuentra en un entorno mucho más alejado de la ciudad. Lo que no se ha confirmado, ni se espera que salga a la luz, es el precio o la extensión de la finca, así como tampoco es previsible que la pareja comparta detalles de la misma una vez comiencen las obras o después, ya que se trata de una faceta privada de su vida. Eso sí, fuentes oficiales han insistido en que se trata de una inversión privada, sobre todo después de las polémicas que surgieron hace algunos años por la reforma de la actual residencia del matrimonio, que se sufragó en parte con medios del Estado.
Hasta la fecha, la heredera y su familia disfrutaban de sus días de descanso en Sölliden, la residencia de verano de la familia real en la isla de Öland. Es precisamente allí donde Victoria suele celebrar cada año su cumpleaños, con una serie de actividades en las que se mezcla la faceta pública y privada de la Princesa. Suelen estar presentes también los Reyes y sus hermanos en la mayoría de las ocasiones, pero se trata de unas vacaciones oficiales tras las cuales es habitual que la familia disfrute de unos días más privados en diferentes destinos.