El viaje de Juan Carlos I a Lisboa para asistir al funeral de su amigo Aga Khan IV
Karim al Hussaini Aga Khan IV conocía a las infantas Elena y Cristina
El evento ha tenido lugar en el Centro Ismaelita de Lisboa
Juan Carlos I se ha desplazado hasta Portugal para asistir al funeral de uno de sus grandes amigos: el príncipe Karim al Hussaini Aga Khan IV. Tal y como informó LOOK, el imán falleció a los 88 años, suceso que fue un golpe muy duro para el Rey emérito y para su hija, doña Cristina. Hay que recordar que fue él quien apostó por la infanta durante una de sus etapas más complejas y le dio trabajo después del caso Noós.
Juan Carlos I se ha dejado ver en Lisboa acompañado de su equipo de seguridad. Ha estado en el Centro Ismaelita, enclave donde ha tenido lugar el evento. Su semblante serio demuestra que esta noticia le ha afectado, de hecho que haya estado allí es significativo porque ha sido una ceremonia estrictamente íntima. La infanta Cristina, quien también le tenía un gran aprecio, no ha podido asistir porque se encuentra en Atenas, en la boda de su primo Nicolás de Grecia.
El abuelo de la princesa Leonor y Aga Khan IV se conocieron en un internado de Suiza, concretamente en Le Rosey. Únicamente se llevan un año de diferencia, así que pertenecen a la misma generación y tienen muchas cosas en común. A sus 88 años, don Juan Carlos usa un bastón para caminar con paso firme y en ocasiones se ayuda de algunos de sus agentes. Vestido con un traje negro, ha intentado ocupar un segundo plano y camuflarse entre el resto de familiares y amigos que estaban despidiendo al príncipe.
Hay que tener en cuenta un detalle importante. La situación que ha ocupado Juan Carlos I demuestra lo unido que estaba al Aga Khan y lo importante que era para él, pues se ha situado en un lugar de honor: justo en el centro, al lado del jeque de Qatar y del duque de Braganza.
En el funeral también ha estado el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo y del primer ministro canadiense, Justin Trudeau. No obstante, el rostro que más miradas ha acaparado, como es lógico, es el del príncipe Rahim, hijo mayor del Aga Khan, quien ha sido nombrado nuevo líder espiritual de los musulmanes ismaelitas.
Una relación auténtica
Para entender mejor esta noticia hay que tener presente que Juan Carlos I y Karim Al Yussayni disfrutaban de una relación auténtica. Se conocieron cuando eran muy jóvenes y prácticamente han estado toda la vida juntos, por eso confiaba el uno en el otro. Se han hecho favores mutuos, pero destaca el gesto que tuvo el Aga Khan cuando contrató a Cristina de Borbón mientras el foco estaba puesto en Iñaki Urdangarin por culpa del caso Noós. Fue el salvavidas de la infanta, quien gracias a la fundación del príncipe empezó a ver la luz al final del túnel.
Según Forbes, en 2022 el imán era uno de los hombres más ricos del mundo y su fortuna estaba estimada en 2.400 millones de euros. Estaba detrás de una red de empresas muy potentes que generaban ingresos bastante suculentos. Sus inversiones abarcaban distintos ámbitos, desde la salud hasta la educación, pasando por el desarrollo social. Es decir, ha dejado un legado que marcará la historia de muchos, de ahí la repercusión que ha tenido su funeral.