Carlos de Inglaterra recurre al yoga para su recuperación postcoronavirus
En una reciente intervención telemática, el hijo mayor de la reina Isabel ha animado a todos los que recientemente han superado el coronavirus a que practiquen esta milenaria disciplina.
El príncipe Carlos nunca deja de sorprendernos. Al margen de su amor por la naturaleza, su incesante deseo de proteger el medio ambiente y la manera en la que intenta fomentar el consumo de productos ecológicos, ahora el hijo mayor de la reina Isabel da un paso más en pos de una disciplina tan milenaria como es el yoga.
En una reciente intervención digital durante un simposio sobre yoga y salud tras el coronavirus, el Príncipe ha asegurado que “los médicos deberían trabajar junto con especialistas en atención médica complementaria para construir una hoja de ruta hacia la esperanza y la curación después de la enfermedad.”
El heredero sostiene que “esta pandemia ha enfatizado la importancia de la preparación, la resiliencia y la necesidad de un enfoque que aborde la salud y el bienestar de la persona en su totalidad como parte de la sociedad, y que no se concentre solo en los síntomas”. A este respecto, Carlos considera que la práctica de yoga juega un papel esencial: “el yoga terapéutico, basado en evidencia, puede contribuir a la salud y la curación. Por su propia naturaleza, el yoga es una práctica accesible que proporciona a los practicantes formas de controlar el estrés, desarrollar la resiliencia y promover la curación”, ha dicho el también duque de Cornualles.
Para Carlos de Inglaterra es fundamental el trabajo en equipo: “cuando trabajamos juntos con un interés común, podemos basarnos en las ideas de los demás y, quizás, construir una hoja de ruta hacia la esperanza y la curación”. El Príncipe ha insistido en los devastadores efectos de la pandemia, pero también ha resaltado la capacidad de superación del ser humano, sobre todo en el momento en el que se siente acompañado y apoyado.
El hijo de la reina Isabel se siente muy afortunado de haber podido superar la enfermedad, que contrajo a principios de la crisis sanitaria: “parece que yo me he salido con la mía, desafortunadamente, no es el caso de millones de personas en el Reino Unido y en todo el mundo.”
El príncipe Carlos no es el único miembro de la familia real que practica yoga de manera habitual. También su esposa, la duquesa de Cornualles ha dicho en alguna ocasión que gracias a esta disciplina es “más flexible”, mientras que al príncipe Guillermo se le ha visto en alguna ocasión haciendo posturas. Incluso Meghan Markle, mucho antes de convertirse en una más dentro del clan Windsor, practicaba yoga de manera rutinaria, ya que su madre, Doria Ragland es instructora de este tipo de ejercicio. En una entrevista antes de la pandemia, el heredero a la Corona dijo que “el yoga tenía efectos beneficiosos tanto en el cuerpo como en la mente y que ayuda a desarrollar la disciplina, la autosuficiencia y el cuidado personal.”