Ocio nocturno, gastronomía variada y cultura: La guía imprescindible de Leonor en Zaragoza

La Princesa Leonor lleva ya una semana en la Academia General Militar de Zaragoza y, además de haber visto ya las primeras imágenes de la heredera en clase, vestida con uno de los uniformes del Ejército de Tierra, ya sabemos que la hija mayor de los Reyes ha disfrutado de su primer fin de semana libre. Mientras que la Reina Letizia y la infanta Sofía se encontraban de viaje en Australia y el Rey estaba volcado en la ronda de consultas de cara a la formación del nuevo Gobierno, la Princesa ha hecho una salida con compañeros y compañeras de clase.

Leonor aprovechó el fin de semana para dar una vuelta por las calles de Zaragoza, en concreto, por la zona universitaria, donde estuvo merendando con otros estudiantes de la AGM.  La Princesa acudió al bar El Tuno, ubicado en la calle Pedro Cerbuna, con varios compañeros, en concreto, se trataba de un grupo de unas 25 personas. Según ha trascendido, la hija mayor de los Reyes está perfectamente integrada con el resto de alumnos y alumnas, aunque junto a ella iban dos escoltas que se colocaron en una mesa cercana, siguiendo sus pasos en todo momento.

Tal como ha publicado El Heraldo de Aragón, fue la Princesa la que se acercó a la barra. Vestida con pantalones oscuros y una camisa rosa, Leonor fue la que habló con la camarera para pedir. En concreto, el grupo degustó pizzas, bocadillos, hamburguesas y huevos rotos, todo para compartir. La cuenta ascendió a 170 euros que dividieron entre todos.

Este ha sido el primer plan de la Princesa en su estancia en Zaragoza, sin embargo, en los próximos meses, Leonor tendrá la opción de conocer mucho mejor la ciudad y recorrer sus calles. No solo podrá acudir a algunos de los locales en los que su padre también recaló en su etapa como caballero cadete, sino que podrá conocer nuevas propuestas. La gran diferencia entre la Princesa y el monarca es que, en tiempos de estudiante de Felipe VI no había ni redes sociales, ni teléfonos móviles, por lo que la información sobre sus escapadas era mucho más reducida y llegaba a cuentagotas.

Los lugares más emblemáticos

Tras su parada por El Tuno, todavía le quedan muchos locales a la Princesa para descubrir, sobre todo, ahora que aún no ha llegado el invierno y los días largos invitan a salir más. Uno de los locales de parada fija para la heredera es el restaurante El Fuelle, ya que todavía conservan allí los cubiertos que utilizó don Felipe en una de las salidas de la AGM.

El Rey acudió con sus compañeros al restaurante y, aunque se comportó como uno más, fue recibido entre aplausos. «Recuerdo que le invitamos a que se pusiese cómodo en consonancia con el ambiente sencillo y familiar que se vivía. Y a que bebiera vino en porrón. Y se le dio bastante bien», aseguró Esteban Valtueña, dueño del local, en unas declaraciones a El periódico de Aragón. En esta velada, el grupo disfrutó de algunos productos típicos de la gastronomía aragonesa, como cordero asado al horno, jamón de Teruel, chorizo, longaniza, y vinos de la tierra. Un menú tradicional que seguro degustará la Princesa en algún momento.  Las calles del Casco Antiguo y el Tubo son los puntos principales para los jóvenes, ya que están llenos de locales de tapas, pero, aunque en su primera salida, la Princesa haya optado por un bar tradicional y de comida menos ‘sana’, lo cierto es que la ciudad tiene muchos restaurantes en los que Leonor podrá apostar por recetas menos calóricas.

Por ejemplo, Casa Lac, Baobab, La Clandestina o Gonzo Bitter Bar, entre otros, destacan por sus menús saludables, con platos con las verduras como protagonistas. Casa Lac está situado en la zona del Tubo y entre sus propuestas culinarias destaca su menú degustación centrado en las verduras como las borrajas, el cardo, las alcachofas o el tomate de la huerta de la Ribera de Navarra.

El Bistro & Café La Clandestina de Zaragoza es un imprescindible de la capital aragonesa que este año, además, se alzó con el primer premio del Campeonato oficial Hostelería de España – Tapas y Pinchos de Madrid Fusión con la tapa ‘Cruz de Navajas’. Destaca por sus brunch y por platos como el ‘carpaccio’ de gamba roja con brunoise de piña, mango y fresa, salsa de lima y caviar de yuzu.

En el Gonzo Bitter Bar sirven una de las mejores carbonaras, mientras que el restaurante Baobab es la opción ideal para los vegetariana o vegana. En este local apuestan por productos locales, ecológicos, sostenibles y de comercio justo. Hay que mencionar también otro de los clásicos de Zaragoza, La Lobera de Martín. Comenzó su andadura en 1969 como un local informal de tapas, pero ahora es un referente en la ciudad que destaca por la cocina tradicional y los ingredientes de calidad.

En cuanto al ocio nocturno, aunque hay toque de queda en la AGM y los alumnos y alumnas deben volver a tiempo -don Felipe se llevó alguna que otra reprimenda en su momento por no llegar tarde o incluso por fugarse en el coche de un escolta-, son muchos los locales que destacan en la ciudad. Es el caso del Tony Wilson, uno de los clásicos de Zaragoza, junto con La Casa del loco, una de las salas más emblemáticas. El Jane Birkin es un referente en la ciudad desde su apertura en 2007 y está ambientado en la actriz anglo-francesa, fallecida este mismo año. La Sala Z es ideal para los amantes de la música en vivo, al igual que el Cabaret café, aunque este último es perfecto para los que prefieren un ambiente más tranquilo.

Tiempo para la cultura

En los días libres, además de disfrutar de la gastronomía local o de tiempo de descanso, Leonor también puede aprovechar para empaparse de la oferta cultural de la ciudad o de paseos por el Parque Grande José Antonio Labordeta, el pulmón verde de la ciudad. Zaragoza cuenta con muchos lugares de interés que merece la pena visitar, empezando por la Basílica del Pilar, aunque no es lo único. Por ejemplo, merece la pena recorrer las riberas del Ebro y sus puentes, visitar el Palacio de la Aljafería o alguno de los museos de la ciudad. Especial atención al Museo del Foro, el de Goya y el Provincial, así como algunos edificios importantes como el Teatro Principal.