Los looks más impresionantes de la gran cita royal europea con motivo del cumpleaños de Ingrid de Noruega
Cumbre real en Noruega: todos los detalles de la gran gala en honor a la princesa Ingrid Alexandra
Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett reaparecen tras recibir amenazas de muerte
El gran cambio de la princesa Leonor en uno de sus años más importantes
Quiniela de tiaras para el gran debut de las nuevas generaciones de royals
La fiesta continúa. Hace tan solo unas horas la Familia Real noruega daba el pistoletazo a una jornada de festejos para celebrar el dieciocho cumpleaños de la princesa Ingrid Alexandra. Debido a la pandemia del coronavirus y las correspondientes restricciones sanitarias no se pudo llevar a cabo el festejo el pasado 21 de enero, fecha en la que la primogénita de Haakon y Mette-Marit cumplía la mayoría de edad. La espera ha llegado a su fin y este viernes ha tenido lugar la gran celebración a la que han asistido miembros de otras Casas Reales europeas.
El enclave escogido ha sido el Palacio de Oslo, por el que han desfilado los royals del momento luciendo sus mejores galas. También ha sido la perfecta ocasión para que las futuras herederas al trono de sus respectiavas Casas Reales debutaran luciendo uno de los accesorios más preciados en este selecto ambiente: las tiaras.
La gran protagonista, sin duda, ha sido la princesa Ingrid Alexandra que para esta especial cita ha optado por reciclar un look que ya lució su madre el 11 de mayo de 2005 durante una recepción en el Ayuntamiento de Oslo con motivo de la visita de Estado a Noruega del emperador Akihito y la emperatriz Michiko de Japón. Se trata de un vestido largo, tal y como dictamina el dress code, en color berenjena de Alberta Ferretti. Una de las características del diseño que más ha llamado la atención es que la diseñadora ha optado por una creación de volúmenes a diferentes alturas de tirante fino.
Por otro lado, ha combinado esta pieza digna de museo con unos salones plateados con detalles de abalorios en la zona de la punta. Aunque, sin duda, lo que más ha llamado la atención es la tiara que ha escogido. Es la Tiara Boucheron que fue realizada en una joyería francesa. Además, es una pieza con una alta carga sentimental para los miembros de la Familia Real de noruega, ya que originalmente perteneció a la princesa Ingeborg, abuela materna del rey Harald. Se la regaló su marido,el príncipe Carlos de Suecia y después la heredaron sus hijas, la princesa heredera Marta, madre del actual soberano noruego. Tras esto, a la princesa Ragnhild, fallecida en el año 2012.
Otra de las asistentes, que no ha pasado desapercibida ha sido Elisabeth de Bélgica, quien cumplía hace unos meses 20 años. La heredera al trono belga también ha lucido con tiara que nunca antes se había visto. Sin duda, un momento histórico. Tal y como dictaminaba el protocolo de gala, la hija mayor de los reyes Felipe y Matilde de Bélgica ha lucido un look con inspiración ochentera. Un vestido en un tono lila con escote palabra de honor y volantes repartidos por todo el diseño. Armani Privé es quien está tras esta creación de la Alta Costura, ya que este mismo modelo ya se pudo ver sobre la pasarela cuando la firma presentó su colección otoño/invierno 2021-2022. Por otro lado, Matilde de Bélgica ha seguido la misma línea cromática que la joven royal y ha apostado por el morado para un diseño algo más clásico.
Máxima de Holanda se ha decantado por un vestido rojo con detalles en zigzag en color blanco, escote barco y falda de tul con vuelo. Ha conjuntado este estilismo con un bolso tipo sobre a tono y una tiara de brillantes. En cuanto a su hija, la princesa Amalia de Holanda, que ha llegado al Palacio del brazo del Rey Felipe VI, ha optado por un vestido capa en color fucsia de lo más favorecedor con un sencillo escote caja firmado por Marchesa.
Los accesorios escogidos para esta ocasión han sido plateados, tanto las joyas como el clutch. Por último, ha incorporado al outfit la tiara de estrellas y diamantes que ya lució su madre el día de su boda con el rey Guillermo en febrero de 2002.