Felipe y Letizia: viaje secreto y exprés a Barcelona antes de Navidad
Los Reyes han vuelto al Palacete Albéniz, ek que fuera residencia oficial de la Familia Real en sus estancias en la Ciudad Condal
Si pensábamos que los Reyes habían dado por finalizada su agenda el pasado viernes para comenzar las vacaciones de Navidad más atípicas de los últimos tiempos, nos equivocábamos. A pesar de que desde a Casa de S.M. el Rey informaban hace unos días, en el habitual correo con el que se comunica la agenda prevista para los próximos días de que “no había actividades oficiales”, lo cierto es que esta mañana, don Felipe y doña Letizia nos han sorprendido con un viaje secreto y exprés a Barcelona.
Sus Majestades se han trasladado hasta la Ciudad Condal para hacer entrega de uno de los premios más importantes de la literatura española, el Premio Cervantes. Un viaje que no estaba anunciado pero que pertenece al ámbito oficial y del que hemos sido conscientes cuando el departamento de comunicación de la Casa Real ha compartido una serie de imágenes del evento a través de la página web.
Don Felipe y doña Letizia han entregado este importante galardón al poeta catalán Joan Margarit. Estaba previsto que la ceremonia de entrega del Premio Cervantes 2019 se celebrase el 23 de abril en el paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares, pero debido a circunstancias relacionadas con la pandemia y en pleno estado de alarma, se ha tenido que posponer hasta ahora y se ha cambiado la capital por la Ciudad Condal. El lugar elegido ha sido el Palacete Albéniz, la que era antaño residencia oficial de los Reyes en sus estancias en Barcelona, aunque ya llevan tiempo sin alojarse en el recinto.
Durante el acto de entrega, reducido por precaución, Margarit ha leído algunos de sus poemas, tanto en castellano como en catalán. Los Reyes han estado acompañados por el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, mientras que el galardonado ha contado con la compañía de su esposa, sus hijos y sus nietos.
Para esta cita, doña Letizia ha rescatado de su fondo de armario un misterioso vestido en color blanco roto que estrenó durante la apertura solemne de la XIV Legislatura. Un diseño cuya procedencia se desconoce y que se caracteriza por el corte lady, bajo asimétrico, escote deshilachado, manga larga y cintura reforzada. Se ha especulado con que podría ser un diseño a medida de la modista con la que la Reina cuenta en Zarzuela y que no solo elabora vestidos a su criterio, sino que también hace ajustes a modelos de diferentes firmas para adaptarlos al gusto de doña Letizia. Lo ha combinado con unos salones en print animal con tachuelas de Magrit , pendientes de diamantes a modo de chatones y su inseparable anillo dorado de Karen Hallam. En cuanto al look beauty, doña Letizia ha optado por un suave maquillaje en tonos tierra, destacando la mirada y la melena suelta, a diferencia de los últimos días que apostaba por recoger su cabello en una coleta alta, su peinado predilecto los últimos meses. Tanto el Rey como la Reina han llevado mascarillas del tipo FFP2, frente a las higiénicas que solían llevar antes.
Este acto sorpresa es el único previsto para esta semana, en la que don Felipe dará su tradicional mensaje de Navidad. Un mensaje que este año será especialmente complicado dadas las circunstancias, no solo por la pandemia del coronavirus, sino también por toda la situación que ha rodeado a la Familia Real los últimos meses.