La desgarradora confesión de Charlene sobre su salud: "Mi cuerpo ya no me lo permite"
La princesa Charlene ha asegurado que ya no puede seguir el mismo ritmo en sus entrenamientos
Charlene fue deportista profesional antes de conocer al príncipe Alberto de Mónaco
Si hay algo que caracteriza a la familia Grimaldi es el hermetismo respecto a cuestiones relacionadas con su vida privada. Como parte de la familia, la princesa Charlene tampoco suele hablar de este tipo de cosas. Sin embargo, el interés por determinados aspectos de la vida de la esposa del príncipe Alberto ha provocado que la ex nadadora rompa su silencio. Sobre todo, porque ha tenido la oportunidad de hablar sobre una de las cuestiones más importantes para ella: el deporte.
Antes de conocer al príncipe Alberto, Charlene desarrollaba su carrera como deportista profesional y, a pesar de convertirse en miembro de la familia Grimaldi, nunca ha dejado de lado la natación. Parte de su agenda se centra en cuestiones relacionadas con el deporte y el trabajo de la Fundación Princesa Charlene está fundamentalmente orientado en este sentido.
Pocos meses después de la clausura de los Juegos Olímpicos de París, la princesa ha concedido una entrevista a una revista francesa en la que ha hablado de cómo el deporte sigue siendo una parte fundamental de su vida, así como de los problemas de salud que ha atravesado en los últimos años. En 2021 la esposa del príncipe Alberto tuvo que permanecer en Sudáfrica por una infección de las vías altas de la que tardó mucho en recuperarse. Es más, incluso se trasladó durante un tiempo a Suiza para continuar con su rehabilitación. Fueron muchos los interrogantes en torno a su estado los que se plantearon en aquel momento.
A pesar de esto, la princesa ha logrado recuperarse y retomar su actividad con normalidad, gracias en parte a su carácter disciplinado y a su constancia. Dos cualidades que tienen mucho que ver con su etapa como deportista. De alguna manera, la esposa de Alberto de Mónaco echa de menos su carrera como nadadora, pero es consciente de que ya no puede llevar el mismo ritmo.
«Camino, voy en bicicleta, nado también, pero no tanto como antes», ha dicho la princesa en unas declaraciones a la revista francesa Gala. Según ha contado, cuando era joven mantenía un régimen de entrenamiento muy intenso y exigente, pero ahora lleva un ritmo más moderado. Una realidad que es complicada de gestionar para ella, ya que le gustaría poder seguir batiendo récords y superando límites, a pesar de que no puede. «Mi cuerpo no me lo permite. Mi espíritu y mi corazón sí, pero mi cuerpo dice que no», ha asegurado Charlene.
Las palabras sobre sus hijos
En esta entrevista, la esposa del príncipe Alberto también se ha sincerado sobre sus hijos, los príncipes Jacques y Gabriella. Según ha contado, a pesar de ser mellizos, son muy diferentes entre sí. «Las conversaciones que puedo tener con Jacques y las que tengo con Gabriela son muy diferentes», ha asegurado Charlene. Tal como ha explicado, Gabriella es más extrovertida y curiosa, mientras que Jacques es más reservado y tranquilo.
Charlene ha comentado que, de momento, prefiere no exponer mucho a los mellizos, a pesar de que tanto ella como el príncipe Alberto son muy conscientes del papel que ambos tendrán que desempeñar en el futuro.