La hija ilegítima de Alberto de Bélgica: “Es muy duro llevar a tu padre a juicio”
Alberto II de Bélgica, pendiente de las pruebas de ADN para asumir la paternidad de Delphine Boël
Alberto de Bélgica da esquinazo al juicio sobre su paternidad
Delphine Boël acaba de pronunciarse sobre el litigio que está llevando a cabo contra su supuesto padre biológico, el rey Alberto II de Bélgica. La mujer, de 48 años, ha decidido contar su difícil historia a la revista ‘Vanity Fair’ y lo ha hecho sin reparos.
El rey Alberto y su madre, la baronesa Sybille de Selys Longchamps, fueron amantes durante 18 años, según la versión de Böel. “Los dos estaban casados, pero sus matrimonios no funcionaban”, declara Böel.
“Cuando era pequeña y salía a cenar con ellos, me quedaba dormida debajo de la mesa del restaurante. Entonces él me cogía en sus brazos y me llevaba a casa”, cuenta Delphine.
Su madre le hizo partícipe de toda la verdad cuando cumplió los 17 años, pero a ella no le extrañó por la buena sintonía que tenían. “Tenemos el mismo sentido del humor. Nos llevábamos muy bien. Íbamos de vacaciones a Córcega, a Saint-Tropez. Nos hacía visitas en Londres…”.
Sin embargo, un día decidió romper relaciones y no quiso saber nada de ella. Por eso, la artista belga ha confesado que “mi madre está muy disgustada. Nunca pensó que Alberto me rechazaría de una forma tan cruel y poco civilizada”.
Por eso, la mujer no ha dudado en cruzar todas las metas posibles para demostrar su parentesco con el que ha sido el hombre más poderoso de Bélgica. Llevan ya ocho años de lucha en los tribunales y, de momento, ha conseguido que el monarca haya tenido que declarar. “Es muy duro llevar a tu padre a juicio. Pero era necesario”, asegura.
El pasado 21 de febrero, Alberto II tenía que prestar declaración en audiencia, pero su abogado ya dijo que no iba a personarse porque podía ser representado por su letrado. De esta forma, el rey daba esquinazo a la prensa, disminuyendo la expectación de un tema que hizo temblar en su momento a la Casa Real Belga.