8 Días de luto para la Reina y un funeral marcado por las restricciones: las claves del último adiós a Felipe de Edimburgo
El marido de la Reina Isabel II expresó en sus últimas voluntades no tener funeral de Estado
El duque de Edimburgo ha fallecido este viernes a los 99 años, una noticia que ha llegado procedente desde Windsor a través de un comunicado donde no se daban más detalles sobre las exequias. «Se harán más anuncios a su debido tiempo», se leía en el texto. El marido de la reina Isabel II no quería un funeral de Estado y, horas después de conocerse la noticia de su muerte, ya se conocían los pormenores de su entierro, que estará marcado por las restricciones sanitarias marcadas por la pandemia.
Según el ‘Daily Mail’, se espera que el funeral se celebre el próximo sábado 17 de abril en una ceremonia que no será precedida de una capilla ardiente. «El cuerpo de Su Alteza Real descansará en el Castillo de Windsor antes del funeral en la Capilla de San Jorge, tras lo que será enterrado en los jardines de Frogmore». Según ‘The Guardian’ se espera que el funeral sea retransmitido por la BBC y que además tenga algún tipo de participación militar «para honrar el servicio del Duque a las Fuerzas Armadas» -fue teniente en la Marina Real británica entre los años 1939 y 1953, cuando Isabel fue proclamada Reina-.
Pero en tiempos de COVID, la Casa Real inglesa se encuentra ahora en pleno dilema, ya que las restricciones sanitarias solo permiten un máximo de 30 personas en este tipo de actos. Al parecer serán ocho los miembros de la Familia Real los que estarán presentes en el funeral representando al resto de sus miembros, entre ellos: la reina Isabel, el príncipe Carlos junto a Camilla, los duques de Cambridge, el príncipe Eduardo y la condesa de Wessex y la princesa Ana.
Quienes serán duda, debido a las diferentes polémicas que han protagonizado, son el príncipe Andrés, su exmujer Sarah Ferguson, sus hijas Eugenia y Beatriz y sus respectivos maridos, así como el príncipe Harry y Meghan Markle.
Hasta que llegue ese día, la reina mantendrá un periodo de duelo de ocho días durante los que no llevará a cabo ningún deber propio de su cargo, y los asuntos de estado también se detendrán. Tras estos ocho días, se decretará además un periodo de duelo oficial de 30 días, durante los que las agendas oficiales de los miembros de la Familia Real se podrían ver alteradas. Además, las banderas continuarán ondeando a media asta y los diputados lucirán una banda negra en el brazo, mientras que los parlamentarios usarán corbata negra en señal de luto.
Según los tabloides del país, la Reina podría enviar un mensaje televisado a los ciudadanos igual que hizo, en marzo de 2002, en vísperas del funeral de su madre, para agradecer el cariño a los ciudadanos británicos. A pesar de que se ha pedido que se eviten las aglomeraciones, numerosos ciudadanos se han acercado a las puertas de Windsor, así como de Buckingham, para mostrar su pesar por la muerte de Felipe de Edimburgo depositando ramos de flores y mensajes en su honor.
En la mítica plaza de Piccadilly Circus también se ha podido ver un enorme cartel el honor del duque de Edimburgo con una fotografía suya y los años de su nacimiento y de su fallecimiento. Habría cumplido 100 años el próximo 10 de junio, y ha sido el príncipe consorte más longevo del Reino Unido.