Alarma en el Reino Unido por la repentina cancelación de un viaje de la reina Isabel
La razón por la que la reina Isabel ha rechazado el premio a ‘anciana del año’
La imagen de la reina Isabel que ha despertado todas las alarmas
La reina Isabel busca maestro pastelero
Los signos que denotan el desgaste de la reina Isabel
Preocupación en el Reino Unido por la reina Isabel. Después de que hace unos días la monarca apareciera en público con un bastón y mostrando llamativos cardenales en sus manos, ahora se ha visto obligada a cancelar un viaje a Irlanda del Norte por prescripción facultativa. El Palacio de Buckhingham ha anunciado que la Reina no podrá realizar este periplo de dos días debido a que los médicos le han aconsejado tomarse un descanso durante unos días. Una recomendación que, según fuentes cercanas a la soberana, ha aceptado a regañadientes.
No es ningún secreto que Isabel II mantiene, a sus 95 años, un firme compromiso con la Corona. A pesar de las complicadas circunstancias a las que se ha tenido que enfrentar en los últimos tiempos, la Reina no ha dejado de cumplir con sus actividades oficiales, sea de manera presencial o telemática y se resiste a ceder el paso a las nuevas generaciones. De hecho, el próximo año celebra su Jubileo de Platino, 75 años en el trono.
Sin embargo, el hecho de que el Palacio de Buckingham haya anunciado este pequeño parón en su agenda ha hecho que los tabloides enciendan las alarmas. Tanto es así, que incluso se ha hablado de coronavirus, algo que rápidamente han desmentido fuentes oficiales, sin dar más detalles al respecto de la condición de la monarca, que no es la primera vez que tiene que cancelar su asistencia a algún acto puntual. En 2016 no pudo asistir a la misa de Navidad en Norfolk por un fuerte resfriado y en el año 2003 se la vio con un bastón por problemas de rodilla que la hicieron pasar por quirófano.
La última vez que se la ha visto en público ha sido, precisamente, este martes, en compañía de los príncipes Carlos y Guillermo en una recepción en Windsor. Unas imágenes que en ningún caso podían hacer pensar en que estuviera indispuesta, sino más bien todo lo contrario. Sin embargo, es cierto que en las últimas semanas su actividad ha sido frenética, quizás demasiado para una persona de su edad. Hasta 14 compromisos, entre los que se encuentra una jornada completa de actos en Gales, con todo lo que ello supone.
Quizás lo único que necesite es un pequeño descanso, al fin y al cabo y, aunque ella se empeñe en decir que la edad es solo un número, por sus ojos ya ha pasado casi un siglo. De hecho, esta misma semana se conocía la noticia de que la soberana ha rechazado de manera muy educada el premio a la ‘anciana del año’, ya que considera que no cumple los requisitos para este reconocimiento porque asegura que la edad es un estado mental.