Sandra Aladro aporta datos que dan un giro radical al accidente de Cayetano Rivera
Los tres testigos presenciales del accidente han declarado que el diestro no presentaba signos de embriaguez
Entre el accidente y el registro del atestado transcurre dos horas que podrían tener vital importancia para el juez
Nuevo giro en el caso del accidente de tráfico que protagonizó Cayetano Rivera el pasado 9 de noviembre en una rotonda próxima a la urbanización en la que reside en Sevilla. Sandra Aladro, colaboradora de Vamos a Ver y directora de la agencia GTRES, ha arrojado luz sobre este incidente que ha puesto en el punto de mira al diestro.
La versión de los testigos que desmonta el atestado
El tiempo justo, el formato vespertino presentado por Joaquín Prat en Telecinco, consiguió en exclusiva el atestado presentado por los dos Policías Locales de Alcalá de Guadaíra que acudieron a la casa de Cayetano dos horas después de que se produjera el accidente contra las palmeras -que tuvo lugar sobre las ocho de la tarde-. Durante la emisión del programa, Sandra desveló en que ese período de tiempo puede ser realmente valioso de cara al juicio.

Cayetano Rivera a su salida del juzgado de Alcalá de Guadaíra. (Foto: Gtres)
Y es que si bien los hechos tuvieron lugar a las ocho de la tarde, -momento en el que los testigos le ayudan-, hasta dos horas después no se elabora dicho atestado. «Ese espacio temporal entre el accidente y el atestado podría ser muy tenido en cuenta por el juez a la hora de valorar si la prueba de alcoholemia hubiese sido efectuada con todas las garantías de la ley», afirma la periodista.
Sobre todo, porque según expresa ese documento, Cayetano olía a alcohol. -solo, en el ejercicio de la halitosis, «olía de cerca», pese a que no existen pruebas de su consumo-. En el mismo, elaborado por los dos Policías Locales, también se detalla que el aspecto del pequeño de los hijos de Paquirri y Carmina Ordóñez era favorable y, por tanto, no existían indicios de un físico «sudoroso, congestionado o pálido» -rasgos que aparecen en estado de embriaguez-. Y no solo eso, sino que el torero habría mostrado una «completa estabilidad».
Un vacío de dos horas puede cambiarlo todo
De ahí, que «pueda jugar un importante papel en el tribunal e incluso invalidar la prueba si se hubiese realizado», resalta Aladro. Además de «respaldar o no» -según la decisión del juez-, «la postura de Cayetano a la hora de someterse a la prueba de alcoholemia».




Copia del atestado presentado por la Policía Local sobre el accidente de Cayetano dos horas después del incidente. (Foto: Telecinco)
Una versión que dista de la contada por los tres testigos presenciales del accidente. Según hemos podido conocer en LOOK, se trataba de dos vigilantes jurado que había en la rotonda de las urbanizaciones y un Policía Nacional que casualmente presenció el accidente, y que declararon en el Juzgado de Alcalá de Guadaíra en cuanto «asistieron y ayudaron a Cayetano en esos primeros instantes». Según su versión, Cayetano Rivera «no presentaba signos de embriaguez».




Cayetano Rivera caminando por la calle. (Foto: Gtres)
De esta forma, Sandra Aladro pone sobre la mesa la clave que daría un giro radical al caso, y es precisamente ese vacío de tiempo existente «entre los hechos sucedidos a las 20:15 y el atestado registrado a 22:10», según mostró el programa El tiempo justo. «Dos horas de diferencia en las que podría venirse abajo la garantía de una prueba de alcohol como prueba definitiva en un juzgado, o respaldar o no la negativa de Cayetano a someterse a la misma dado el tiempo transcurrido desde el accidente», concluye Aladro.