Isabel II y Marilyn Monroe, unidas por Chanel nº5
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El pasado 8 de septiembre se cumplió un año del fallecimiento de Isabel II, la soberana más longeva de la historia y -se podría decir- la reina más querida de la monarquía británica. Durante más de 70 años en el trono coincidió con algunos de los rostros más aclamados del mundo, pero su vínculo con Marilyn Monroe quedará para siempre grabado en la historia general.
Ahora, con motivo de la exposición dedicada a Gabrielle Chanel en el museo V&A de Reino Unido, se ha podido saber que a la Reina y a la icónica actriz le unía un curioso olor. Se trata del mítico Nº5, un perfume que utilizaron múltiples celebridades y que, se ha podido saber, llegó hasta el Palacio de Buckingham. La actriz confesó en más de una ocasión que, incluso, utilizaba ese aroma para dormir. Y gracias a esta exposición que recibe el nombre Manifesto se ha descubierto que también fue uno de los olores preferidos de la reina Isabel.
Entre todos los objetos que forman parte del museo, se encuentra una emotiva carta de la soberana dirigida a Frederick Arthur Montague Browning en la que elogia esta emblemática fragancia que fue creada en 1921. «Como siempre, has descubierto justo lo que yo deseaba especialmente y quiero agradecerte mucho por el regalo de cumpleaños de la fragancia Chanel. ¡Ya lo estoy usando y espero oler mejor! Es muy amable por tu parte pensar en mí de esta manera. Nuevamente muchas gracias. Atentamente, Elizabeth R», reza la misiva que ahora forma parte del homenaje hacia la diseñadora situado en Londres.
Lo cierto es que tanto Isabel II como Marilyn Monroe siempre han estado vinculadas a Chanel, aunque por motivos muy diferentes. La firma de lujo francesa formaba parte del vestidor de la madre de Carlos III, siendo habitual verla lucir prendas características de la maison. Pero lo que todo el mundo recuerda es cuando la Reina traicionó a Camila de Cornualles en uno de los días más importantes de su vida. Cuando llegó el día de su matrimonio con el entonces príncipe Carlos, la actual Reina Consorte pidió a todas las mujeres que vistieran de cualquier color menos blanco; una norma que se saltó por completo su suegra. Isabel II decidió aparecer con un traje de Chanel completamente blanco llevando a cabo su particular venganza. Desde entonces, quedó todavía más constancia de la mala sintonía entre las dos mujeres en la vida de Carlos de Inglaterra.
Por su parte, Marilyn Monroe consiguió catapultar el perfume más famoso del mundo, siendo la culpable de que el Chanel nº5 siga siendo sinónimo de sensualidad. La primera vez que la actriz habló de este perfume fue en 1952, durante una entrevista para Life Magazine. «¿Qué te poner para dormir?», preguntó el entrevistador. A lo que ella, sin ningún contrato de publicidad por medio y siendo completamente sincera, contestó: «Tan solo unas gotas de nº5». Y, desde entonces, consiguió meter toda su fama y su feminidad en un bote de cristal que llegó hasta Palacio, enamoró a Isabel II y la vinculó para siempre con el símbolo sensual más popular de los años 50.