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La temporada de premios ya ha dado el pistoletazo de salida, tanto en España como a nivel internacional. En la cuenta atrás para los Premios Oscar, las alfombras rojas en todo el mundo se van sucediendo, en un despliegue de glamour muy esperado este año, tras una etapa complicada marcada por la pandemia de coronavirus. Este fin de semana ha sido el mundo de la música el que ha estado de celebración, con la ceremonia de entrega de los Premios Grammy, que ha tenido lugar en la ciudad de Los Ángeles.
Una gala que, como era de esperar, ha estado cargada de momentos para el recuerdo. Los premios más importantes del mundo de la música han celebrado su 65 ceremonia de entrega en una jornada marcada por reencuentros, bromas, bailes inesperados y looks que pasarán a la historia de la moda.
El Arena Crypto.com de la Ciudad de las Estrellas ha sido el lugar elegido para la celebración de la gala, en la que Bad Bunny ha sido uno de los grandes protagonistas. El cantante dio el pistoletazo de salida a la entrega de premios con su tema Después de la Playa, y logró que muchos de los asistentes, como Taylor Swift, se arrancaran a bailar a ritmo de merengue.
Trevor Noah ejerció de maestro de ceremonias y no dudó en sorprender al público al presentar a dos de los presentes, Adele y La Roca que, al parecer, nunca hasta la fecha, se habían visto. El presentador dijo que la cantante tenía muchas ganas de conocer al intérprete, así que el momento era idóneo para que se ‘encontraran’.
Harry Styles, uno de los triunfadores de la noche, también fue blanco de las bromas del presentador por sus llamativos estilismos: «Las mujeres le tiran las bragas a este hombre y cuando se las pone se ve mejor con ellas que ellas. Es el hombre más sexy del mundo», dijo.
Uno de los momentos más emotivos de la velada vino de la mano de Kim Petras. La cantante subió al escenario junto a Sam Smith, tras ganar el Premio a Mejor Actuación de Dúo. «Soy la primera mujer transgénero en ganar un Grammy», dijo la artista, que aprovechó además la ocasión para dar las gracias a Madonna por su intensa lucha por los derechos de la comunidad LGBT+.
Jill Biden, esposa del presidente de Estados Unidos, ha seguido los pasos de Michelle Obama y ha ejercido presentadoras de los premios. Un rol que ha compartido con el maestro de ceremonias y con otros rostros conocidos como Cardi B, Olivia Rodrigo, Dwayne Johnson, Viola Davis, Billy Crystal, James Corden y Shania Twain.
Beyoncé batió récords al convertirse en la artista más galardonada de la historia de los Grammys, con cuatro premios más que se añaden a los 28 que ya tenía. Aunque no estuvo presente en la gala, Rosalía también fue una de las premiadas. La cantante española se llevó el Premio a Mejor Álbum Rock, Urbano o Alternativo Latino por Motomami. Un reconocimiento más a su prolífica trayectoria.