La drástica decisión de Joana Sanz horas antes de declarar en el juicio de Dani Alves
Este lunes, 5 de febrero, ha arrancado el juicio contra Dani Alves
El futbolista brasileño está acusado de una presunta violación a una joven de 23 años
Se espera que la todavía esposa del futbolista, Joana Sanz, testifique en favor de Alves
Este lunes, 5 de febrero, ha arrancado el juicio contra Dani Alves. El futbolista brasileño está acusado de una presunta violación a una joven de 23 años producida en la noche del 30 al 31 de diciembre de 2022, en la discoteca Sutton de Barcelona. Visiblemente delgado, el ex futbolista, que se enfrenta a una pena de entre nueve y doce años de prisión, se ha sentado en el banquillo de los acusados, aunque no ofrecerá su testimonio hasta la tercera y última sesión de la causa, que se producirá este miércoles.
Esto último se debe, específicamente, a que la defensa de Alves ha pedido que el brasileño declare al final, el último día del juicio, tras escuchar a todos los testigos y peritos. Ante el tribunal desfilarán hasta 28 testigos, entre ellos la propia denunciante y las dos jóvenes que la acompañaban la noche en cuestión, una amiga y una prima, que ya revelaron ante la jueza instructora del caso que el futbolista, supuestamente, las magreó antes de llevarse a la denunciante al baño; el personal de la discoteca, así como el amigo que acompañaba a Alves en el establecimiento y la todavía esposa del deportista, Joana Sanz.
Si bien todo apunta a que la declaración de Joana será en favor del ex jugador del FC Barcelona, los acontecimientos podrían dar un giro de 180º a último momento. «Joana Sanz se siente utilizada por Alves. No sabe si testificará a favor de él en el juicio», ha revelado Laura Fa en Espejo Público, en Antena 3. La periodista, además, ha contado que la modelo tinerfeña no está siguiendo el caso por la televisión, ya que está en contacto directo con una persona que se encuentra en el interior de la Audiencia Nacional de Barcelona, desde donde le está reportando todo lo que ocurre.
Joana prestará declaración este próximo martes día 6, a petición de la defensa de Alves, y es posiblemente a razón del revuelo mediático que se va a producir en torno a su persona estos días, que la modelo ha tomado una drástica decisión: eliminar su rastro del universo 2.0. En concreto, Joana Sanz ha inhabilitado su cuenta de Instagram, donde reunía a más de un millón de seguidores, de modo que si tratas de buscar su perfil, la página aparece como no disponible.
A través de Instagram, Joana Sanz se ha pronunciado varias veces sobre la causa de su marido, y desvelado cómo ha sobrellevado la entrada en prisión del deportista hace ahora más de un año. En una de sus últimas publicaciones, Sanz posteó, sin ir más lejos, un mensaje que reflejada el aciago trance que atraviesa. «A los que nos tocó ser fuertes este año, que en el 2024 nos toque ser felices», dijo. Antes, en julio, Joana denunció por esta misma vía, ser víctima de acoso y amenazas por parte de algunos usuarios en la red. Lo hizo haciendo públicos varios de los mensajes que recibiría casi a diario: «¡Te vas a morir, perra! ¡Te encontraremos en cualquier parte, perra! ¡Te burlas de tu esposo después de que él se haya disculpado contigo, perra! Estamos autorizados para matarte a ti», rezaba uno de los comentarios.