Encierro de San Fermín, 13 de julio: horario y ganadería

Las fiestas en honor a San Fermín tienen sus raíces en la Pamplona medieval del siglo XII, cuando la ciudad se limitaba principalmente a la zona de Navarrería. San Fermín, reconocido como el primer obispo de Pamplona, es conmemorado por su martirio en Amiens. En 1186, una reliquia del santo fue trasladada a Pamplona por el obispo Pedro de Artajona, fortaleciendo así la devoción local que se extendió a San Cernin y San Nicolás. Inicialmente, las celebraciones eran mayormente religiosas, destacando las Vísperas, la Procesión, la Octava y la «comida de los pobres», organizada por el Ayuntamiento. Los festejos se vincularon con ferias de ganado y corridas de toros desde el siglo XIV, aunque originalmente se celebraban en distintas épocas del año.

En 1591, los ciudadanos de Pamplona lograron trasladar las festividades al 7 de julio, coincidiendo con los mercados de ganado, inaugurando oficialmente los Sanfermines. A través de los siglos, se amplió el programa festivo con tambores, clarines, trofeos en la Plaza del Castillo, representaciones teatrales y corridas de toros. El siglo XX vio un florecimiento de nuevos ritos como el Riau-Riau y el chupinazo, este último introducido durante la posguerra para marcar el inicio de las fiestas. La novela de Ernest Hemingway, «Fiesta», publicada en 1926 (originalmente «The Sun Also Rises»), catapultó los Sanfermines a la fama internacional.

Guía completa sobre el encierro

El encierro es una tradición arraigada en Pamplona, que se celebra diariamente del 7 al 14 de julio como parte de las festividades en honor a San Fermín. Esta emocionante carrera implica correr delante de seis toros salvajes y seis cabestros a lo largo de un recorrido de 875 metros, que culmina en la plaza de toros.

La historia del encierro se remonta a tiempos antiguos, cuando los carniceros acompañaban a los pastores en la tarea de guiar al ganado hacia la plaza. Con el tiempo, esta práctica se convirtió en un evento popular que desafía a valientes corredores a enfrentarse a la velocidad y la fuerza de los toros.

Para participar en el encierro no es necesario registrarse, pero se deben respetar ciertas normas para evitar problemas con las autoridades, especialmente abstenerse de participar bajo la influencia del alcohol. La carrera atraviesa el casco antiguo de Pamplona, y aunque está vallada para seguridad de los espectadores, aún presenta riesgos significativos.

Antes del inicio, los corredores suelen reunirse para invocar la protección de San Fermín con cánticos tradicionales. El evento comienza con el lanzamiento de cohetes, que marcan diferentes etapas del encierro: el inicio, la liberación de todos los toros en el recorrido, su llegada a la plaza, y finalmente, cuando regresan a los corrales.

Correr en el encierro implica estrategia y valentía. Los participantes deben comenzar con precaución, acelerar antes que los toros, mantenerse cerca de ellos si lo desean, y apartarse con cuidado para evitar incidentes con otros corredores.

Sábado 13 de julio: D. José Escolar Gil

El próximo encierro del 13 de julio se perfila como un evento desafiante, especialmente este año al coincidir con un sábado, día que históricamente ha sido el más peligroso en las fiestas de San Fermín. Esta vez, los protagonistas serán los toros de José Escolar, conocidos por su imponente presencia y por la tensión que generan entre los corredores y toreros.

El origen de esta ganadería se remonta a 1940, cuando fue fundada por los hermanos Olano. Inicialmente, comenzaron con hembras de la línea de Cruz y vacas, junto con un semental proveniente de Samuel Flores. A lo largo de su historia, la ganadería pasó por varias manos, incluyendo las de José Lorenzo García, los Hijos de Lisardo Sánchez bajo el nombre «Encinasola», la viuda de Chaves, y José Domecq de la Riva.

Más tarde, don Felino Fernández la consolidó con reses adquiridas de Victorino Martín, obtenidas de los señores Fernández Durán y Vergara González. En 1981, la propiedad de la ganadería pasó a manos de José Escolar Gil, quien decidió mantener exclusivamente las reses de origen Victorino Martín en su ganadería

José Escolar se ha establecido como una figura fija en Pamplona desde su debut en 2015. Aunque inicialmente sus encierros fueron marcados por incidentes graves, con una media alarmante de 2.6 corneados por encierro durante sus primeras participaciones, los últimos años han mostrado un cambio notable.

Horario y recorrido

El recorrido de los encierros comienza en los corrales al inicio de la Cuesta de Santo Domingo, donde los mozos cantan a San Fermín y esperan la salida de los toros. La carrera empieza a las 8:00, marcada por el repicar del reloj de la Iglesia de San Cernin (San Saturnino).

Desde Santo Domingo, los toros persiguen a los mozos hacia la Plaza del Ayuntamiento, luego continúan por la calle Mercaderes antes de tomar la curva hacia la Calle Estafeta, el tramo más largo del recorrido. Finalmente, pasan por la curva conocida como Telefónica antes de entrar en la plaza de toros.