El ‘no’ de Podemos pone en peligro el pacto del PSOE con Junts del que depende la estabilidad de Sánchez

Podemos, a través de su coportavoz y secretario de Organización, Pablo Fernández, ha ratificado su «rotundo no» a la hora de mostrar el apoyo a la cesión del PSOE de las competencias en inmigración y control de fronteras a Cataluña. Esta negativa pone en peligro real el acuerdo de los socialistas con Junts del que depende la estabilidad del Gobierno de Pedro Sánchez, ya que la votación necesita de una mayoría absoluta a la que no se llegaría sin los podemitas.

Fernández ha comparecido este jueves y asegurado que en Podemos van a votar «radicalmente no a este acuerdo». El portavoz podemita ha aclarado que si bien Junts ya les ha mandado «algún mensaje» para interesarse por su apoyo a la ley para la delegación de competencias en materia de inmigración y gestión de fronteras, dicho acuerdo «legitima el racismo institucional» y, por tanto, debe recibir la negativa por parte de la formación morada.

Este ‘no’ de Podemos en un mensaje «muy claro y muy directo» a Junts, se suma a las dudas del grupo Sumar, donde un diputado de Compromís ya ha anunciado su voto en contra. Todo ello pone en estos momentos en peligro la proposición de ley registrada por PSOE y Junts para la delegación de competencias en materia de inmigración a Cataluña, que tanta polémica ha levantado y de la que puede depender la permanencia de Pedro Sánchez y su Gobierno al frente de España.

Al tratarse de una ley orgánica, se requiere de mayoría en la votación final de la iniciativa que se registró el pasado martes en el Congreso de los Diputados. Podemos, con cuatro diputados, ya ha mostrado rotundamente que votará en contra de la cesión del PSOE a la Generalitat, mientras que Sumar también podría colaborar en una fragmentación del sector de la izquierda radical dentro de los socios de Sánchez.

Al rechazo ya sabido de PP y Vox se suma el de Podemos, que insiste en que la situación es inamovible. A los 174 votos en contra de Partido Popular (137), Vox (22) y Podemos (4), hay que unir el del diputado Alberto Ibáñez, de Compromís, quien ya anunció que la cesión pretende desplazar la agenda política hacia «marcos racistas», en la misma línea que argumenta Podemos.

Otra diputada de Compromís y portavoz del partido dentro del grupo parlamentario Sumar, Àgueda Micó, continúa sin aclarar su voto, pero ha adelantado que votará lo mismo que Ibáñez después de un debate interno en su formación y con la dirección nacional. El líder de IU, Antonio Maíllo, ha dicho este jueves que en su partido hay «dudas técnicas, legales e ideológicas», sumando otra incógnita dentro de los socios de Sánchez de cara a una votación en la que se juega la estabilidad del Gobierno.

Podemos pone en jaque la cesión

El acuerdo entre PSOE y Junts pone en peligro a Pedro Sánchez pero desde la formación separatista se mantienen firmes y, tal y como adelantó OKDIARIO, han amenazado a sus socios socialistas con que «si la ley no sale adelante, será el Waterloo de Sánchez».

Para que la ley orgánica salga adelante en el Congreso de los Diputados, se necesitan 176 votos a favor, la mitad mas uno, por lo que, contando con los votos en contra de PP, Vox y UPN, si Podemos mantiene su rechazo, impediría que la cesión resultara fructífera pese al acuerdo. Ione Belarra, secretaria general de la formación morada, censuró duramente el pacto del PSOE «con un partido antiinmigración que compite con la ultraderecha catalana», advirtiendo categóricamente que «no se hará con los votos de Podemos».