Domènech cree que la bronca entre Iglesias y Errejón lleva abierta desde el 26J

El portavoz de En Comú Podem, Xavier Domènech, cree que el debate entre el líder de Podemos, Pablo Iglesias, y el ‘número dos’ Íñigo Errejón, sobre la estrategia del partido, que ayer saltó a la redes sociales, está abierto desde la pérdida de un millón de votos en las elecciones del 26 de junio.

«Es normal que ese debate exista, lo que no es normal es que dos tuits abran ese debate mediático», ha subrayado en declaraciones en el Congreso.

Para Domenech, es «absolutamente espectacular» que dos mensajes cruzados entre Iglesias y Errejón, en los que debatían sobre el «tono» y las «formas» de los mensajes de Podemos, puedan abrir las portadas de los diarios.

A su juicio, se trata de un debate que se está viviendo desde hace tiempo y que el partido debe resolver a su tiempo.

«El impacto mediático quizá no era esperado, debemos tener un debate responsable en este sentido», ha admitido.

La bronca Iglesias-Errejón

Pablo Iglesias e Íñigo Errejón trasladaron ayer a Twitter sus discrepancias sobre el futuro del partido y la estrategia que debe seguir para «seducir» al electorado.

Errejón advertía de que «a los poderosos ya les damos miedo, ese no es el reto. Lo es seducir a la parte de nuestro pueblo que sufre pero aún no confía en nosotros».

A los poderosos ya les damos miedo, ese no es el reto. Lo es seducir a la parte de nuestro pueblo que sufre pero aún no confía en nosotros.

— Íñigo Errejón (@ierrejon) 20 de septiembre de 2016

Por su parte, Iglesias replicaba que «hablando más claro y siendo diferentes seducimos más».

Sí compañero @ierrejon pero en Junio dejamos de seducir a 1 millón de personas. Hablando claro y siendo diferentes seducimos más

— Pablo Iglesias (@Pablo_Iglesias_) 20 de septiembre de 2016

Más tarde, otros dirigentes de Podemos acudieron al auxilio de Iglesias tras su enfrentamiento de Errejón, como fue el caso del cofundador de la formación morada, Juan Carlos Monedero, o el secretario de Organización, Pablo Echenique.