Detenido un marroquí que dice ser de Hamás tras agredir sexualmente a 2 viajeras en un tren en Gallur

Un marroquí de 23 años que viajaba en un tren, ha sido detenido en Gallúr (Zaragoza) por la Guardia Civil, el pasado domingo, como presunto autor de delitos de amenazas, agresión sexual y desorden público. El detenido ha pasado a disposición del Juzgado de Guardia de la capital aragonesa en la mañana de este lunes.

Según se ha podido conocer, el joven viajaba en un tren que había salido de Zaragoza a las 13.00 horas dirección Pamplona. A mitad de trayecto, el joven se levantó de su asiento, empezó a gritar y amenazar en el vagón para terror de los pasajeros, aclamando que pertenecía al grupo terrorista de Hamás.

Después, el marroquí se acercó a dos mujeres del vagón a las que agredió sexualmente, mostrando sus genitales y poniéndoselos en la cara.

Los hechos se produjeron este pasado domingo,15 de octubre, cuando en torno a las 14.15 horas, la Guardia Civil recibió un aviso a través del 112 solicitando la presencia de una patrulla, puesto que un pasajero estaba alterando el orden público.

Una hora más tarde, en torno a las 15.50 horas, se produjo el arresto del joven, después de que el tren permaneciese parado durante una hora, con unos 400 pasajeros a bordo.

Este viernes, la Unión Europea alentó a aumentar las medidas de seguridad antiterrorista tras el llamamiento del fundador de Hamás, Khaled Meshaal, a salir a las calles, y convertir el pasado viernes en «una jornada de la ira», poniendo a todo Occidente en alerta, tras la ofensiva que lanzó el grupo terrorista Hamás contra la población civil de Israel el pasado 7 de octubre.

Otros sucesos también han sembrado el pánico en Francia. El instituto Gambetta-Cernot de Arrás ha sido evacuado por un aviso de bomba. En este centro escolar fue degollado el viernes un profesor al grito de «Dios es el más grande» y otras tres personas resultaron heridas de gravedad, por un checheno identificado como Mohamed M. Este fin de semana, se han producido otras evacuaciones en el país galo, como el Museo del Louvre, el palacio de Versalles o la estación de Game de Lyon, por amenazas de bomba y ataques terroristas, según fuentes oficiales.