Almeida descarta el desmantelamiento de Cuatro Vientos a corto plazo

El futuro del aeropuerto de Cuatro Vientos es incierto. El propio Ayuntamiento de Madrid duda incluso que su destino se zanje durante la segunda fase de la Operación Campamento, proyecto donde se deberían desmantelar estas instalaciones y recalificar los terrenos. OKDIARIO ha podido saber a través de fuentes municipales que el consistorio que dirige José Luis Martínez-Almeida ve muy lejano y difuso este extremo y reconoce que todavía queda mucho camino que recorrer para decidir algo sobre Cuatro Vientos. «Esto entraría en todo caso en la segunda fase de la Operación Campamento, es decir, dentro de varios años. Después habría que hacer el planeamiento urbanístico y la recalificación de los terrenos. No es algo fácil», han asegurado.

El lugar donde se sitúa el aeropuerto, en el distrito de Latina, está totalmente rodeado de zonas urbanizadas. Algo que podría hacer comprensible una futura reconversión de los terrenos. Edificios, comercios y hasta colegios rodean una zona donde aterrizan y despegan aeronaves tanto de ala fija como helicópteros.

Ahora bien, la problemática de su desmantelamiento como aeropuerto radica sobre todo en que cuenta con instalaciones de carácter histórico y con una zona de uso militar. Así, el lugar, que en parte es casi un museo, cuenta con tres torres de control, dos inutilizadas, y una de ellas declarada bien de interés cultural desde el 16 de diciembre de 2021 por ser la torre de control aéreo más antigua de Europa.

No sólo esto, sino que es el aeropuerto/base más antiguo de España, fundado en 1911 durante el reinado de Alfonso XIII y, como tal, es un lugar de gran interés cultural. En la parte militar de estas instalaciones se ubica el Pabellón de Oficiales, más conocido como «el Palace» entre los aviadores, construido entre 1915 y 1916, además del Museo del Aire y del Espacio. En la parte civil se levanta un hangar, hoy utilizado por helicópteros de la Policía Nacional, que se construyó en los años 40.

Fuentes de la Fundación Infante de Orleans, una de las entidades que ocupan una parte de este aeropuerto, aseguran a OKDIARIO que ha habido presiones vecinales por el ruido y la peligrosidad, pero no creen que estas instalaciones corran peligro. «Hoy por hoy no tenemos constancia de que corra peligro alguno», afirman.

Tres hangares en peligro

Unicaja ha puesto a la venta tres hangares, uno de los cuales fue la nave donde estuvo la sede de Aeronáutica Industrial S.A., más conocida por sus siglas AISA, compañía constructora de aeronaves española fundada por el ingeniero de caminos Jorge Loring en 1923.  Allí se construyeron aviones de reconocimiento Fokker, los conocidos helicópteros AISA, y algunos de los famosos autogiros C-7 y C12.

OKDIARIO ha podido saber que entre los empresarios y fundaciones que operan en la zona se teme la entrada de algún operador de logística que compre las naves y las dedique a almacén. «Se perdería el carácter aeronáutico del polígono que tiene salida directa a las pistas del aeropuerto», afirman.

Asimismo denuncian que la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Almeida se desentienden del tema y que no han iniciado el estudio de todas las edificaciones de Cuatro Vientos para conocer si hay más edificios históricos en la zona. «Prefieren decir que la competencia de declaración corresponde al Estado, aunque una parte de las instalaciones no son de titularidad de Aena».

Subastas en 2020

A finales del año 2020, Aena convocó una subasta pública de ocho aeronaves que se encontraban completamente abandonadas en un hangar y sin ser reclamadas en el aeropuerto Madrid-Cuatro Vientos. Los precios de salida que ofreció la empresa estatal oscilaron entre los 1.000 euros y los 60.000 euros con un importe conjunto de 129.000 euros.

Según publicó Aena en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 21 de noviembre de 2020, se convocó subasta pública, dividida en ocho lotes, de las aeronaves que se encontraban en situación de declaración de presunción legal de abandono en el citado aeropuerto madrileño.

Dos aeronaves del modelo Cessna 421C salieron a subasta con precios mínimos de venta más altos, de 60.000 y 30.000 euros. Otros aparatos abandonados que se subastaron fueron del modelo Cessna 402-C, Cessna 182L, Siai Marchetti S 205-20R, Morane Saulnier MS-893-E, Diamond Aircraft Industries INC. DA20-A1 y Piper PA-28-180.