Peligra el suministro de carne: los ganaderos sacrifican 71.000 vacas más por el alza de costes

El alza de los costes y el encarecimiento del alimento para los animales ha obligado a los ganaderos a aumentar el número de vacas sacrificadas en 71.000 durante los primeros cinco meses del año. Una situación que evidencia como el sector primario sigue trabajando a pérdidas y como el incremento de los insumos está llevando al límite al campo.

Según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, hasta el pasado mes de mayo se habían sacrificado 1.071.186 vacas, lo que supone 71.000 reses más que las 999.725 del mismo periodo del año anterior. Un aumento que se debe al alza de los costes que están experimentando en el último año, lo que obliga a muchos ganaderos a sacrificar más animales para reducir los costes de producción.

Para visibilizar la situación que está atravesando el segmento agrario y ganadero en España, al igual que otros muchos sectores, Milagros Marcos, secretaria nacional de agricultura y despoblación del Partido Popular confirma que «en el último año el coste de la energía eléctrica ha subido un 270% para este sector y la energía supone un 60% de sus gastos», confirma. Además, la experta matiza que en los tres últimos años el crecimiento del coste de la energía ha sido de un 1.000%.

Los fertilizantes, impulsados por el incremento del precio del gas, se han encarecido hasta un 300%. «Lo peor es que la situación no va a mejorar porque el precio del gas no va bajar», alerta. Por su parte, el coste de los abonos se ha disparado un 250% en el último año y el del gasoleo un 73%. En esta misma línea, el precio de los fitosanitarios ha repuntado un 48%, el de los plásticos un 46% y el de las semillas ha subido un 19%. Y para rematar, los costes salariales se han incrementado un 30%.

La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) denuncia que los productores de pollos no ven aplicada la subida de precios en sus beneficios, mientras que ese incremento del precio sí se nota en el producto final que se vende en los mercados y supermercados. «La situación es asfixiante por la cantidad de energía que tenemos que gastar para climatizar nuestras granjas», denuncia Ramón Santalla, secretario de ganadería UPA, quien asegura que ningún granjero ha visto reflejado en su sueldo la inflación de precios.

Por ello, los ganaderos avisan de que «en otoño podríamos tener problemas», pues será entonces cuando se junte el gasto energético actual y el gasto del combustible para calentar las granjas. Cuando eso ocurra, «no vamos a ser capaces de seguir criando porque es asfixiante en términos económicos» y los productores como él, no tendrán capacidad económica suficiente para hacer frente a esos gastos.

«Precio justo» de la leche

Los ganaderos de Cantabria han vuelto a pedir este viernes un «precio justo» de la leche que garantice la supervivencia del sector, ya que aunque está subiendo, lo hace a un ritmo «muy lento» en comparación con los costes de producción, lo que a medio largo plazo podría suponer una caída en la elaboración de la leche por el poco beneficio que reciben los productores.

el presidente de la organización Aigas englobada en La Unión de Uniones, Manuel Sainz, ha informado de la situación actual del sector primario en Cantabria, dado que los consumidores han visto cómo se ha ido elevando el precio que pagan por la leche y otros productos procedentes de la producción primaria, pero esta subida de precios «no está repercutiendo de la misma forma en lo que se le paga al productor», ha detallado. Según ha recordado, ya el año pasado los ganaderos estuvieron manifestándose cada semana, y a día de hoy, la situación «está peor», porque la energía, los combustibles o los plásticos han duplicado su coste, así como el pienso y la alfalfa para la alimentación del ganado.

«Nos dicen que ya empiezan a traer grano de Ucrania, no sé si para tranquilizarnos, pero vemos que el pienso sigue subiendo día a día», ha señalado el presidente de Aigas, quien espera que el precio de la leche suba porque la producción está bajando cada mes. Sainz ha explicado que los ganaderos están optando por matar vacas para producir carne, ya que «la nómina de la leche no alcanza» para cubrir las facturas.