La cantidad exacta de dinero que deberías tener en tu casa según el Banco de España
El 65% de los españoles utiliza el dinero en efectivo en su vida cotidiana
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El «Estudio sobre hábitos en el uso del efectivo 2023» del Banco de España muestra que el efectivo sigue siendo el método de pago preferido en España, por encima de tarjetas y dispositivos móviles, a pesar del crecimiento en el uso de estas tecnologías. Según el estudio, un 70% de los encuestados prevé que el uso del efectivo se mantendrá estable hasta 2025, especialmente en sectores como los pequeños comercios y la hostelería, donde este medio de pago resulta clave.
Según este informe, el 65% de los españoles utiliza el dinero en efectivo en su vida cotidiana, y la mayoría (7 de cada 10) utiliza lo cajeros automáticos para obtenerlo, lo que hace relevante conocer los límites de retirada establecidos por Hacienda. Sin embargo, el efectivo parece estar perdiendo popularidad entre las generaciones más jóvenes: un 39% de los menores de 35 años espera reducir su uso en el futuro, mientras que entre los mayores de 64 años, sólo un 16% prevé disminuir su dependencia del efectivo. Esta diferencia generacional sugiere un cambio gradual hacia los pagos digitales, impulsado principalmente por los usuarios más jóvenes.
La cantidad de dinero en efectivo que se puede tener en casa
El Banco de España señala que no existe un límite en la cantidad de dinero en efectivo que se puede guardar en casa, siempre que el origen de los fondos sea legítimo y esté debidamente declarado ante Hacienda. A pesar de que esta práctica es legal, el organismo enfatiza la necesidad de justificación de los ingresos y advierte que Hacienda monitorea las transacciones bancarias superiores a 3.000 euros, exigiendo una declaración del origen del dinero en estos casos para evitar el fraude fiscal.
El Banco de España sugiere que la cantidad ideal para situaciones de emergencia debería cubrir entre seis y doce meses de gastos básicos, que incluyen vivienda, alimentación y transporte. Sin embargo, también menciona que esta cantidad no necesariamente debe estar físicamente en casa y recomienda mantener el dinero en una cuenta bancaria con liquidez.
Guardar efectivo en casa conlleva ciertos riesgos, tanto por la posibilidad de robos como por la depreciación causada por la inflación. Según cálculos de la Asociación Europea de Gestoras de Fondos (Efama), una cuantía de 10.000 euros en casa perdería casi 100 euros de valor anualmente debido a la inflación.
Finalmente, aunque los pagos digitales y las transacciones bancarias han ganado popularidad, el Banco de España reconoce que muchas personas prefieren el efectivo por su accesibilidad. El organismo, defiende el uso de efectivo para aquellos con acceso limitado a otros medios de pago, remarcando que la disponibilidad de efectivo en casa es una decisión personal que implica evaluar tanto los beneficios como las posibles desventajas.
Los movimientos que vigila Hacienda
La Agencia Tributaria ha incrementado su vigilancia sobre el uso de dinero en efectivo en España. Aunque es legal guardar efectivo en casa sin un límite máximo, ciertos movimientos pueden generar sospechas y desencadenar investigaciones fiscales. Los bancos son clave en este proceso, ya que deben reportar operaciones inusuales, como ingresos o retiradas superiores a 3.000 euros, o aquellos movimientos en los que se emplean billetes de 500 euros, ya que podrían indicar posibles actividades fraudulentas. Para evitar problemas con Hacienda, es esencial que los ciudadanos puedan justificar el origen de sus fondos.
Las transferencias que superan los 6.000 euros están sujetas a un control más estricto, ya que los bancos deben notificar dichas operaciones a la Agencia Tributaria. Además, según la normativa, transferencias superiores a los 10.000 euros requieren una justificación detallada.
En cuanto al transporte de efectivo, es obligatorio declarar cantidades superiores a 10.000 euros al ingresar o salir del país, mientras que el límite en operaciones nacionales se establece en 100.000 euros. No reportar estas transacciones puede acarrear sanciones que van desde el 2% al 25% dela cuantía total no declarada, con multas adicionales de hasta 2.500 euros para casos que superen los 10.000 euros.
En lo que respecta a pagos digitales, Bizum permite transacciones de hasta 1.000 euros por envío, con un máximo anual de 10.000 euros que deben reportarse como ingresos en la declaración de la renta. Para autónomos, este tipo de ingresos también deben ser registrados fiscalmente, ya que Hacienda monitorea las transacciones digitales con el mismo rigor que los ingresos tradicionales.
La Ley Antifraude, implementada en julio de 2021, redujo el límite de pago en efectivo de 2.500 a 1.000 euros para transacciones comerciales entre profesionales y empresas, aunque las operaciones entre particulares están exentas. Este límite incluye el total de la operación, por lo que dividir el pago en varias partes no exime de la obligación de cumplir con la normativa. En una operación irregular, cualquiera de las partes puede denunciar a la otra y quedar libre de sanciones. Incluso un tercero puede presentar una denuncia, resultando en sanciones sin aviso previo.
Las multas por superar el límite de pago en efectivo alcanzan el 25% de la transacción. Para no residentes y personas que no operan profesionalmente, el límite es de 10.000 euros.