Nagelsmann y Allegri, favoritos para sustituir a Zidane
Julian Nagelsmann y Massimiliano Allegri son los dos entrenadores que destacan en el casting del Real Madrid para reemplazar a Zinedine Zidane. El técnico francés acabará su ciclo a final de temporada y encontrar un sustituto óptimo se ha convertido en una prioridad para la entidad
El Madrid da por finiquitada la era Zidane: se irá de forma amistosa a final de temporada
La debacle copera ante el Alcoyano ha dejado a Zinedine Zidane en una posición más que delicada al frente del Real Madrid. El técnico francés está tocado y casi hundido dentro de un club en el que se respetará su figura debido a los éxitos pasados, pero donde no se confía en él para el futuro más próximo. La búsqueda de un reemplazo para Zizou centra las miradas de la opinión pública y el trabajo de la dirección deportiva madridista, y en el casting, aún reducido en cuanto a candidatos firmes, destacan dos nombres, uno atractivo por su edad, filosofía de juego y ambición, como Julian Nagelsmann, y otro, Massimiliano Allegri, que lleva tiempo en la agenda de la cúpula y que sería la opción experta para gestionar un vestuario sobre el que se aproxima una revolución.
El preparador alemán se ha destapado como una de las grandes opciones para los grandes de cara al futuro. Con sólo 33 años, consiguió hacerse un nombre en la Bundesliga a los mandos del proyecto del Hoffenheim, cuyo fútbol atrevido no iba rendido con los buenos resultados. Nagelsmann aúna todas las características que destacan en el Real Madrid para que un entrenador pueda marcar una etapa en la entidad, y es el tapado para reemplazar a Zidane a final de temporada.
La vigilancia del Madrid sobre Nagelsmann se retrotrae a su etapa en el Hoffenheim, y lo que comenzó como una opción remota fue ganando peso al tiempo que su aterrizaje en el RB Leipzig resultaba de lo más satisfactorio. Su filosofía de juego, con mucho intercambio de posición y basada en el atrevimiento en sus sistemas ofensivos, es muy atractiva en la casa blanca, donde ven en él a un entrenador capaz de construir un equipo destacado por el fútbol vertiginoso, valiente y centrado en sus jugadores ofensivos. Puro Real Madrid.
Los acercamientos con Nagelsmann existieron, como reconoció el actual entrenador del RB Leipzig en una entrevista con Marca. «Mantuvimos llamadas telefónicas, pero al final el que decidí fui yo. Creía que todavía no era el paso correcto ir al Real Madrid. Yo era uno de los candidatos y la lista no era muy extensa. Para mí, fue muy importante», afirmó, entendiendo la postura del club sobre él, una postura que ha cambiado, acelerando su progresión debido a la situación actual del primer equipo madridista.
El Leipzig, escollo para el fichaje
«Acordamos que podíamos volver a hablar en un futuro si el Real Madrid necesitaba un entrenador… y yo estaba disponible», añadió Nagelsmann, que ahora es el preferido de una parte del club para reemplazar a Zidane. Fue al término de la primera etapa del técnico galo cuando se produjo el primer tanteo sobre Julian y ahora, con el final ¿definitivo? de Zizou como entrenador madridista, el joven alemán puede estar en disposición de aceptar la oferta que desestimó tiempo atrás. Ahora, y no antes, sí está preparado para afrontar un reto de este calibre.
Una de las complicaciones en torno al posible fichaje de Nagelsmann es su contrato con el RB Leipzig. El técnico se encuentra comprometido con el club alemán hasta el 30 de junio de 2023, y desde el equipo de la multinacional de bebidas energéticas no pondrán las cosas fáciles para desbloquear la posición de su gran activo. En cualquier caso, la posibilidad de dar un salto a todo un Real Madrid invita a considerar de forma positiva la viabilidad de la operación.
En busca de un ‘estilo Bayern’
El entrenador llevó la pasada temporada al Leipzig hasta las semifinales de la Champions League, eliminando a dos pesos pesados como el Tottenham y el Atlético de Madrid en octavos y cuartos, respectivamente. En la presente temporada, el conjunto del noreste de Alemania se encuentra en segunda posición de la Bundesliga, y en disposición de pelearle el campeonato al todopoderoso Bayern de Munich. Precisamente, el estilo de juego de los bávaros es el espejo en el que se miran en el Madrid en visión Nagelsmann y realmente creen que es el único que puede conseguir la ansiada suma de resultados + juego atractivo que reclama el público del Santiago Bernabéu.
Nagelsmann es una oportunidad en el mercado, pero también invita a una carrera de fondo por hacerse con sus servicios. La competencia existe, e Inter de Milán y el propio Bayern de Munich se han fijado en el técnico para el futuro. Ambas entidades tienen proyectos de presente suficientemente sólidos, sobre todo en el caso de los alemanes con Hans Flick a los mandos, y el Real Madrid, y sus urgencias actuales, cuentan con ventaja a la hora de realizar una apuesta con un importante potencial satisfactorio.
Allegri, la opción de la experiencia
El dilema que existe en el club, y que continuará en las próximas semanas hasta la decisión final, es si apostar ya por Nagelsmann o dejar pasar la oportunidad para centrarse en un entrenador de presente. En este último perfil, al que se adaptarían José Mourinho y Massimiliano Allegri, se impone el presente y la llegada de un técnico con sobrada experiencia internacional para hacerse cargo de un vestuario de mucho nivel y en el que la buena gestión de egos se convierte en imprescindible para el triunfo del equipo.
Massimiliano Allegri es la ‘opción segura’ dentro del casting del Real Madrid. El italiano es un entrenador al que la cúpula tiene en gran consideración desde hace años, y en más de una ocasión se le ha tanteado para su llegada al equipo blanco. Actualmente sin equipo, Allegri busca un proyecto en el que construir a medio plazo, motivo por el cual ha desestimado las ofertas que le han surgido desde su marcha de la Juventus en verano de 2019.
Los pros de Allegri, que decantarían la balanza sobre Nagelsmann, se resumen en su mayor categoría como entrenador, fruto de la experiencia en el Milán, donde estuvo cuatro temporadas, o la propia Juventus, en la que permaneció cinco. Además, su capacidad de liderazgo se sobreentiende superior a la del jovencísimo técnico alemán, que a sus 33 años no lo tendría fácil para hacerse con un vestuario en el que pesos pesados como Sergio Ramos o Luka Modric cuentan con mayor edad que el propio Julian.