La sociedad Barroso – Yáñez quiere dar sus frutos en 2025
Yáñez debutó en Montilivi con el primer equipo tras la baja última hora de Rodrygo
Son los verdugos de Arbeloa. Ambos canteranos están teniendo un año con mucho protagonismo
Jaime es el pichichi del Juvenil A con 11 goles en 17 partidos disputados
Arbeloa tiene a dos verdugos con mucha proyección. Jaime Barroso y Daniel Yáñez (generación 2007) están teniendo un año con mucho protagonismo. El primero es el pichichi del Juvenil A con sus 11 goles en 17 partidos. Dani, por su parte, ha hecho su debut con los mayores en Girona. Los dos jugadores son proyectos a largo plazo. El Real Madrid blindó a sus dos pupilos en noviembre y en diciembre. La Fábrica sabe pulir a sus joyas.
Por otra parte, otros nombres del Juvenil A de Arbeloa han destacado. Jesús Fortea, lateral derecho, había sonado para ser uno de los posibles sustitutos de Dani Carvajal. De hecho, entrenó un par de veces con el primer equipo. Valdepeñas y Diego Aguado, zagueros de profesión, también dieron un golpe encima de la mesa. Ambos debutaron con el Castilla y Diego conoció incluso sus primeras convocatorias con Carlo Ancelotti. El Real Madrid sí apuesta por la cantera.
Yáñez y Barroso, delanteros de futuro
Jaime Barroso empezó el curso pisando fuerte. En sus ocho primeros partidos con el Juvenil A esta temporada, el ariete marcó en siete ocasiones. Titular indiscutible para Arbeloa, el 9 es feroz. Alto, potente, rápido y con mucho olfato. Jaime es un killer nato. Sus buenas actuaciones le llevaron a la selección sub-18 y, justo antes de acabar el año, Barroso hizo su debut profesional con el Real Madrid C. Ante el Illescas, Álvaro Gómez-Rey le dio un cuarto de hora. El ariete demostró toda su personalidad, luchando cada balón y pegándose con los centrales las veces que hiciera falta.
Desde bien joven, el madrileño ha sido el terror de las porterías rivales.Se formó en equipos humildes como el Periso y el Sporting Hortaleza, es en la 2021-22 que el madrileño se une a la cantera de un club profesional, concretamente a la del Rayo Vallecano. Empezó como extremo izquierdo pero rápidamente fue convertido en delantero centro.
En su única temporada como rayista, el delantero enjauló 29 goles con el Cadete B. Unos números impresionantes que le llevaron al Real Madrid, aunque Barcelona, Valencia y el Atlético de Madrid también insistieron. Pero el corazón de Jaime siempre fue blanco, y eso desde siempre.
Por su parte, Daniel Yáñez también ha dado el boom. Conocido por ser el señor de la Youth League, el extremo derecho y su pata zurda han aterrorizado a la mini Champions. En seis encuentros europeos este curso, cuatro zarpazos. Por su banda, el gaditano es un puñal, y Raúl le dio su oportunidad. Debutó el 20 de octubre con el filial blanco ante el Alcorcón y no estuvo lejos de marcar. Desde entonces, Yáñez es un habitual del Castilla y es su revulsivo deluxe.
La guinda del pastel llegó el 7 de diciembre. 24 horas después de haber jugado en Murcia con el filial, Ancelotti se lo lleva a Montilivi. La baja última hora de Rodrygo catapultó al nativo de Cádiz. Nadie esperaba a que tenga minutos, sin embargo, los tuvo. Con el 0-3 definitivo en el marcador, Ancelotti le llamó para disputar los últimos instantes del encuentro. Daniel disputó solamente unos segundos, pero los recordará para siempre. «Llevo mucho tiempo soñando con este momento, desde que nacía era del Real Madrid», confesó el joven después del partido.
El futuro de Jaime Barroso y Daniel Yáñez parece estar bien dibujado en el Real Madrid. Ambos futbolistas destacan en las categorías inferiores y están teniendo grandes oportunidades. La confianza de Chamartín en ellos es total. Ambos fueron blindados por el club y el mensaje es claro: los dos son apuestas a largo plazo. Ahora, toca cargar las pilas y seguir trabajando. 2024 fue un gran año para la dupla, pero 2025 depara cosas todavía más grandes.