El Real Madrid reacciona tarde ante Olympiacos y rompe una brillante racha
Chus Mateo acabó expulsado
Fournier estuvo brillante por el bando visitante (28 puntos)
El conjunto blanco acabó perdiendo de diez (86-96)
El Real Madrid ha perdido este jueves por 86-96 frente al Olympiacos en la jornada 22 de la temporada regular de la Euroliga, con papel clave del escolta francés Evan Fournier para los visitantes, que han lucido su liderato a la espera de que jueguen el Fenerbahce y el AS Mónaco.
En el Movistar Arena, los locales empezaron con un parcial de 9-3 y Georgios Bartzokas gastó pronto su primer tiempo muerto, del cual sus pupilos volvieron con las pilas cargadas. Esa reacción se canalizó con un triple de Sasha Vezenkov y otro más de Kostas Papanikolaou, empatando la contienda (11-11) a 4:52 de zanjar el primer cuarto.
El buen desempeño de los visitantes tuvo continuidad con un 2+1 de Fournier, sacando falta a Walter Tavares, y luego con un par de acciones certeras de Luca Vildoza, incluyendo un triple frontal y una bonita asistencia al francés para anotar con apoyo en tablero. El 12-19 era peligroso y Chus Mateo también paró el reloj, con ánimo de calmar.
Y los merengues así lo interpretaron, mitigando gracias a Usman Garuba el poste bajo de un Olympiacos encomendado a Fournier desde el perímetro. A 4:41 minutos de la primera pausa reglamentaria, un triple de Dzanan Musa a la contra avivó al pabellón tras un taponazo de Mario Hezonja a Papanikolaou, acercando al Real Madrid en el marcador (19-22).
El Real Madrid sostiene al Olympiacos en la primera parte
Al comienzo del segundo acto, Chus Mateo eligió de bajitos a Sergio Llull y Andrés Feliz, dando tregua a un Facundo Campazzo que no afinaba. Enfrente, Giannoulis Larentzakis había entrado para desenvolverse por la bombilla y Nikola Milutinov para urdir el juego interior, conservando la ventaja griega (23-31) a 6:06 del descanso.
También el joven Hugo González, últimamente preferido antes que Xavier Rathan-Mayes, daba aire en defensa a un Real Madrid inquieto. Pero era espeso todo y Campazzo volvió a la cancha junto a Tavares, para ayudar a Hezonja y Musa en busca de una remontada que Shaquielle McKissic, Vildoza y Vezenkov complicaron con respectivos triples (36-45).
El último medio minuto del cronómetro caldeó el ambiente, a raíz de una falta de McKissic sobre Tavares y donde la revisión arbitral bajo petición local descartó que fuese antideportiva; y casi de inmediato, a causa de una dudosa falta de Hezonja sobre Vezenkov en la lucha por un rebote. Entre tiros libres y quejas, llegó el descanso con 38-47.
El equipo del Pireo reflejaba predilección por los triples (8 de 18) frente a los tiros de dos (6 de 18) después de 20 minutos, dinámica que siguió en la reanudación con dos aciertos de Nigel Williams-Goss, desde la esquina y luego en un lateral. Además, Vezenkov por dentro era otra amenaza para un Real Madrid que no tardó en verse 44-57 abajo.
Remontan los griegos
Tiempo muerto de Mateo, parón por un problema en los videomarcadores y revisión arbitral en una falta poco protestada, ese era el panorama sin chispa que el Movistar Arena veía a 6:12 de acabar el tercer cuarto. Musa y Campazzo trataron de salir al rescate de los blancos, pero el problema estaba bajo los aros, pues Tavares se cargó rápido de faltas.
Con el objetivo de cambiar las tornas, el caboverdiano se sentó y el conjunto madrileño posó en Garuba y en Eli John Ndiaye sus esperanzas. Mientras, los de Bartzokas siguieron a lo suyo y castigaron con tres triples prácticamente seguidos, uno con la firma de Vildoza y dos de Fournier, para goce de la grada visitante y ampliando la brecha (54-70).
Le salía poquísimo a un Real Madrid sin magia, Garuba falló una canasta fácil debajo del aro rival, Campazzo erró un triple lateral e, ipso facto, Llull tampoco coló otro intento de tres puntos desde el frente. Como un martillo pilón, Fournier cerró el tercer periodo casi sobre la bocina con un nuevo triple, que estableció el 54-73.
Regresaron Feliz y Rathan-Mayes al juego exterior de los merengues, en aras de probar algo distinto si querían otra de esas remontadas de película. Un par de canastas de Llull y Hezonja en la pintura así lo demostraron (61-78), por lo que Bartzokas solicitó tiempo muerto; no lo necesitaba Fournier, en estado de gracia, con sus lanzamientos lejanos.
Chus Mateo acaba expulsado
Otro que aportaba era Milutinov, quien rubricó el +20 (63-83) con un triple sobre la bocina de posesión. McKissic machacó igualmente con otro triple, el enésimo en la cuenta de un Olympiacos que se durmió en los laureles y cerca estuvo de pagarlo caro tras un triple de Llull, un robo de Garuba culminado en bandeja y la aparición sorpresa de Rathan-Mayes.
El escolta canadiense logró un triple a tablero, sobre la bocina de posesión y a la remanguillé, y que supuso el 78-86 a 2:19 del final. Se erigió entonces Milutinov en salvador de su equipo, con un tiro certero en la pintura (78-88) y cerrando el rebote en la jugada posterior. La crispación era total en el plantel madridista, con Mateo expulsado.
Por doble técnica, el jefe del banquillo del Real Madrid se marchó de la cancha a escasos segundos, habiendo protestado una falta recibida por Musa y sin tiempo para milagros, el Olympiacos consumó su victoria y se situó en la cúspide de la Euroliga con balance de 16-6; por su parte, el equipo merengue tiene un registro de 12-10, en la zona del play in.